Nuestro país está enfrentando una alarmante crisis alimentaria que afecta a un porcentaje importante de la población. Según un estudio realizado por el Centro de Almaceneros y Comerciantes Minoristas de la Provincia de Córdoba, la combinación de una inflación descontrolada y el aumento constante de los precios de los alimentos básicos agravó el déficit nutricional en la Argentina.
El informe se llevó a cabo el mes pasado sobre un total de 4.800 hogares en las 23 provincias del territorio nacional, utilizando tanto entrevistas telefónicas (sistema CATI) como presenciales. El objetivo de dicha iniciativa fue determinar la situación alimentaria de los hogares con ingresos económicos mensuales por debajo y ligeramente por encima de la línea de pobreza.
Los resultados del estudio revelaron una preocupante situación en cuanto al acceso a alimentos básicos en los hogares argentinos. Se establecieron seis grupos de hogares, con ingresos mensuales que van desde $ 100.000 hasta $ 250.000, y se comparó la variedad y cantidad de productos alimenticios que pudieron adquirir en relación a la Canasta Básica Alimentaria propuesta por el Indec.
Al respecto, se constató que, debido a la inflación desenfrenada, los hogares con ingresos más bajos están experimentando un grave déficit alimentario. Cada vez, les resulta más difícil acceder a una alimentación adecuada, ya que los recursos económicos no les permiten cubrir sus necesidades básicas.
Sobre el particular, se indicó que el 77% de los menores de las familias pobres no desayuna y el 71% no cena. En tanto, el 62% no merienda y el 46% no almuerza. Son chicos que pertenecen a hogares cuyos ingresos son de hasta $ 100.000. Por su parte, se agregó que los adultos de esas mismas familias también saltean comidas: el 88% no cena, el 82% no desayuna, el 61% no almuerza, y el 44% no merienda. En esos hogares carne, verduras y frutas ya no se comen.
Entre sus conclusiones, la mencionada entidad insiste en remarcar que «la crisis alimentaria en Argentina es una realidad alarmante que requiere atención inmediata». «Es necesario tomar medidas urgentes para abordar esta crisis, como implementar políticas que controlen la inflación, promover el acceso a alimentos asequibles y nutritivos, y fortalecer los programas de asistencia alimentaria para los hogares más vulnerables», reflexionó.
A continuación, el Centro de Almaceneros consideró que «Argentina necesita un enfoque integral que aborde tanto las causas estructurales de la crisis alimentaria como las necesidades inmediatas de su población. Solo a través de esfuerzos conjuntos y acciones coordinadas será posible superar esta crisis y garantizar que todos los argentinos tengan acceso a una alimentación adecuada y nutritiva».