La actividad económica cierra el año con un signo de interrogación, aunque con perspectivas decididamente optimistas para 2025. Ocurre que el Índice General de Actividad (IGA) de la consultora de Orlando Ferreres (OJF) reveló que habría caído 1,1% interanual en noviembre, aunque respecto a octubre observó una suba del 0,1%, lo que implica un regreso a la senda positiva. Aun así, en los primeros 11 meses de 2024 se acumuló una retracción del 4,4%. La recuperación de la economía es dispar y hay sectores con crecimientos importantes que impulsan los indicadores al alza, mientras otros siguen en franca recesión.
Así lo indica el último informe de la consultora, que aclara que los sectores de la economía más dinámicos siguen siendo el agro y la minería, mientras que en los últimos meses comienza a verse una mayor incidencia positiva de la intermediación financiera. En contraposición, la construcción muestra niveles muy bajos de actividad y aunque habría pasado el piso de su caída, el rebote sigue con dificultades para afianzarse.
“La actividad llega con perspectivas positivas para el cierre de un año difícil, que vio una fuerte caída y un rebote rápido, aunque dispar a nivel sectorial. En 2025, esperamos que los sectores más aletargados mejoren, y volver al crecimiento económico, con una marcha más uniforme de la actividad”, señaló la consultora.
En lo que refiere al sector de la Agricultura y ganadería, registró en noviembre un crecimiento de 5,5% en la comparación interanual, acumulando entre enero y noviembre de 2024 una expansión de 36,3%, medida contra un año donde predominó la sequía. En detalle, el agro sigue como uno de los sectores más dinámicos, anotando un avance de 18,5% anual, con buenos datos provisorios de la cosecha de trigo y con buenas perspectivas para el maíz y la soja, gracias a un escenario hídrico positivo.
Cabe mencionar que en diciembre, de acuerdo a la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), las empresas del sector liquidaron US$ 1.966 millones de dólares; lo que implica un incremento del 58% en relación al mismo mes de 2023, así como una baja del 1,6% en comparación con noviembre de 2024. El resultado anual del año pasado arrojó una suba del 27%.
En tanto, la actividad industrial anotó en noviembre una merma de 0,3% interanual, mientras que la serie sin estacionalidad reflejó un avance de 0,9% mensual, luego de la baja de octubre pasado. En el acumulado del año, la contracción en la industria alcanza el 6,8%, números que siguen entre los más altos de la historia.
Al interior de los rubros manufactureros, se registra una fuerte heterogeneidad en la industria: la producción de alimentos (particularmente el complejo aceitero) y en menor medida las refinerías equilibran las caídas del resto de los sectores, donde la peor evolución se encuentra en la producción de minerales no metálicos, sector vinculado a la actividad de la construcción: en noviembre cayó 12,7% interanual y 21,6% en el acumulado.
Autos en caída
Por su parte, la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara) informó ayer que la venta de autos finalizó 2024 con un total de 414.041 unidades patentadas, lo que representó una caída de 7,9% frente a 2023 (cuando se registraron 449.492 vehículos vendidos).
No obstante, la entidad informó que en diciembre el número de vehículos patentados ascendió a 21.602 unidades, lo que representa una suba del 16,3% interanual, ya que en diciembre de 2023 se habían registrado 18.573 unidades. Sin embargo, si la comparación es contra noviembre de este año, se observa una baja del 40,3%, ya que en el pasado mes se habían registrado 36.212 unidades vendidas.
“Las cifras de este mes fueron muy buenas y los 21.600 patentamientos confirman el mejor diciembre de los últimos seis años, seguramente con el arrastre de varios patentamientos que por diversas razones no pudieron ser inscriptos en noviembre”, explicó el presidente de Acara, Sebastián Beato.
Alertan por el cierre de casi 10.000 empresas
El presidente de Industriales Pymes Argentinos (IPA), Daniel Rosato, aseguró que el Gobierno “no tiene una política industrial” y afirmó que el sector no está preparado para enfrentar la apertura económica que impulsa. A raíz de esta situación remarcó que durante 2024 se cerraron 9.900 empresas pymes y se perdieron más de 220.000 puestos de trabajo.
“Tenemos una apertura del comercio internacional de importaciones y la industria nacional no está preparada para enfrentar esa competencia”, señaló Rosato en declaraciones radiales, donde destacó que los altos costos energéticos, impositivos y laborales, sumados a la inflación en dólares, hacen que los productos nacionales sean menos competitivos frente a los importados.
“Tenemos muchas empresas pymes que están pensando en importar”, alertó el titular de IPA, que añadió que a la crisis de competitividad se suma la falta de mano de obra calificada.