El presidente del Instituto de Investigaciones para la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL), Carlos Melconian, estimó que la sequía va a generar un agujero fiscal de $1 billón este año y que, debido a eso, el actual nivel de inflación mensual del 5,5% al 6% constituye «un piso» para lo que resta de 2023.
«Esta es una mala administración, pero, además, la piña de la sequía es de knock out», afirmó Melconian en declaraciones al programa Esta Mañana que se emite, por Radio Rivadavia.
En ese sentido, dijo que «si el anterior agujero fiscal supuestamente firmado con el FMI, tenía una determinada expansión de dinero que garantizaba un piso de 90% a 100% de inflación anual, ahora hay que agregar como mínimo 1 billón de pesos de pérdida de retenciones que no son sustituibles».
«Tengo la impresión que se ha complicado muchísimo el tema, tanto en el área dólar en materia cambiaria como de reservas. Hay enorme posibilidad de que en abril el giro sea de 360 grados, de que en materia de reservas Sergio Massa vuelva a cuando tomó el Ministerio en agosto de 2022», pronosticó.
En otro aspecto, calificó de «fantasía» a los recursos del Fondo de Garantía de Sustentabilidad y opinó que las operaciones financieras anunciadas recientemente por el Ministerio de Economía «terminan con más emisión».
«Cuando se tiene 70% de bonos públicos, que el Estado debe honrar, se genera la magia contable de ‘te pago, pero me los devolvés’», sostuvo el titular del IERAL.
En ese sentido, explicó que, desde el punto de vista de la administración del Estado, «los bonos de deuda que tenía el FGS se los consideró deuda intrasector público» de modo que, a su criterio, «estuvo la fantasía de que era dinero para los jubilados».
Al respecto, explicó que, para la técnica de administración pública presupuestaria, las ganancias del fondo «se han incluido como ingresos de rentas generales por lo que es un asiento contable». «A punto tal que, si tengo que pagar salarios por $100 y tengo ingresos de $100 del FGS, el déficit fiscal da cero, pero al día siguiente te siguen faltando los 100 pesos para pagar los salarios y se paga vía emisión monetaria», detalló.
En ese sentido, explicó que, desde el punto de vista de la contabilidad con el Fondo Monetario Internacional (FMI), «la rentas del FGS son corregidas o excluidas como ingreso para calcular el déficit fiscal porque es una ficción».
Melconian se refirió al concepto «rentas de la propiedad», las ganancias financieras que tiene el Tesoro nacional, que este año no se pueden computar como ingresos corrientes, a diferencia de 2022 cuando el acuerdo con el Fondo permitió sumar 0,3% del PBI como entradas bajo ese concepto.
Por esa razón, opinó que las operaciones de intercambio de bonos anunciadas por el Ministerio de Economía conllevan «hacerse trampa al solitario» y anticipó que el resultado final de la misma «es más emisión monetaria».