Los precios de los agroalimentos desde la chacra (origen) a la góndola (destino), se multiplicaron en julio, por 3,4 veces lo cual equivale a que el consumidor pagó 3,4 pesos por cada peso que recibió el productor, según el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) elaborado por el sector de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME),
El informe reveló que «en promedio, la participación del productor explicó el 26,9% de los precios de venta final y la mayor participación la tuvieron los productores de frutilla (60,8%), mientras que la menor fue para los de limón (8,2%)».
El documento indicó que «la brecha en los productos frutihortícolas, de las 19 frutas y hortalizas que integran la canasta se multiplicaron por 4,7 veces en julio».
En el caso de los productos ganaderos, «en los cinco productos y subproductos ganaderos que componen esa canasta, el consumidor abonó 3 veces más de lo que recibió el productor».
El limón (12,3 veces), el zapallito (9,6), la zanahoria (8,4), la cebolla (7,3) y la naranja (6,2 veces) fueron los cinco productos que presentaron mayor diferencia entre los precios de origen y destino.
El informe de la CAME agrega que «el limón fue el alimento con mayor brecha entre el productor y el consumidor por cuarto mes consecutivo y lo atribuye a que se le paga muy poco al productor y no se observaron variaciones en origen, es decir, se mantiene el monto desde comienzo de cosecha, que fue en abril».
En lo que refiere al zapallito, «sus precios subieron tanto al productor (30,6%) como al consumidor (45%). Por su parte, en la zanahoria se observó una disminución del 24,1% en origen y del 9% en góndola», añade el informe.
La cebolla mostró una suba mensual del 3% en origen y del 17% en destino. A su vez, la naranja tuvo un aumento de precios del 12% en origen – como consecuencia de las sequías hubo una caída de oferta que ocasionó escasez en las variedades de mayor calibre en provincias como Entre Ríos, lo que elevó su precio – , mientras que en góndola no hubo variaciones».
Entre los productos que presentaron menor diferencia entre el precio que recibió el productor y el que pagó el consumidor se encuentran dos de origen animal y tres de origen frutihortícola.
En el caso de los huevos (2,1 veces) – producto con la brecha más baja por cuarto mes consecutivo – y el pollo (2,7), por lo general tienen sistemas de producción integrados, lo que significa que todos los actores de sus respectivas cadenas de valor son parte del riesgo del negocio.
Mientras los huevos se incrementaron el 7,3% en origen y el 13% en destino, los precios del pollo subieron 16,9% al productor y 8% al consumidor. El aumento en origen respondió a un ajuste por la caída del precio del mes pasado a causa del bloqueo a las exportaciones por la gripe aviar. Cabe destacar que el precio aún no retornó a los niveles previos ni con la aplicación del dólar maíz, ya que incide directamente en los costos de alimentación para estos productos.