La Casa de Pepino, ubicada en Fructuoso Rivera 287, celebrará este jueves su 20º aniversario como centro cultural, reafirmándose como uno de los espacios más emblemáticos de barrio Güemes. El festejo será entre las 18:30 y las 21, con una jornada especial que incluirá la inauguración de “Puerto Inspirado”, una muestra colectiva que reúne a más de veinte artistas y recupera la memoria del espacio a lo largo de dos décadas. La entrada será libre y gratuita.
La actividad abrirá con una performance poética a cargo de Cecilia Ciccarelli y Fede Fernández, quienes integrarán lectura, danza y bandoneón en una propuesta concebida especialmente para el aniversario. También habrá música en vivo del Trío Vergara, reforzando el carácter artístico y comunitario del encuentro. En simultáneo, en la sala del Almacén se podrá visitar la exposición “Infancias, Huella y materia”, de la artista Anahí Maldonado.
Además, se habilitará un espacio participativo dedicado a la memoria de artistas y gestores culturales vinculados al lugar, y se exhibirán líneas de tiempo que reconstruyen la historia del edificio, del antiguo Pueblo Nuevo y del cauce de La Cañada, claves para comprender el vínculo del centro con el territorio que lo rodea.
La celebración permitirá también revisitar el valor histórico del inmueble. La casona, construida en 1914 y diseñada por el ingeniero José Bettolli, posee una singular forma de barco, un rasgo arquitectónico que alude al antiguo curso de La Cañada, cuyas aguas golpeaban el muro sur y daban la sensación de que la casa “navegaba”. Este detalle se convirtió, con el tiempo, en uno de sus sellos más característicos.
Un edificio que “navega”, la historia detrás de la casona
La casona fue construida en 1914 y diseñada por el ingeniero José Bettolli, quien le otorgó una singular forma de barco. Esa silueta respondía al antiguo cauce de La Cañada, cuyas aguas golpeaban contra el muro sur y daban la sensación de que la casa “navegaba”. Este detalle se transformó en un sello distintivo del edificio.
Su origen está ligado a José “Pepino” Tuci, inmigrante italiano que a fines del siglo XIX abrió allí un almacén de ramos generales, comercio que pronto se volvió un centro social para los vecinos. Su apodo dio nombre al lugar, que desde entonces se conoce popularmente como “La Casa de Pepino”.
En su interior se conservan objetos y elementos originales que reconstruyen la vida en la Córdoba de principios del siglo XX. Destacan un sótano que funcionaba como heladera natural, un sistema de poleas para subir y bajar mercadería y artefactos domésticos que muestran los usos cotidianos de la época. La planta alta estaba destinada a la vida familiar de los Tuci, permitiendo entender la convivencia entre hogar y comercio.
De almacén histórico a centro cultural
El edificio fue recuperado y puesto en valor el 9 de diciembre de 2005 por la Municipalidad de Córdoba, que lo transformó en el espacio cultural actual. Desde entonces sostiene una programación estable que incluye artes visuales, teatro, música, escritura y diversas expresiones creativas, consolidándose como un referente del patrimonio cordobés.
La muestra Puerto Inspirado podrá visitarse hasta febrero del año próximo, de lunes a viernes de 8 a 20 y fines de semana de 9 a 20.
Más de cien años después de su construcción y a veinte de su reapertura como espacio cultural, la Casa de Pepino sigue siendo un símbolo de identidad, memoria y encuentro, una parada obligada para vecinos y turistas que buscan conectar con la historia profunda y el presente artístico de barrio Güemes.









