Más de 31 mil personas colmaron el Anfiteatro José Hernández en una noche histórica del Festival de Doma y Folklore de Jesús María. El viernes fue testigo de un evento inolvidable, con música folclórica y cuarteto que hicieron vibrar al público como pocas veces antes.
La jornada tuvo como protagonista principal al Chaqueño Palavecino, quien ofreció un espectáculo de casi tres horas repleto de sus grandes éxitos. Canciones como A don Amancio, La sin corazón, Juan de la calle, El dedo en la llaga y La ley y la trampa fueron coreadas con fervor por una multitud que no dejó de aplaudir. Un momento destacado fue cuando el Chaqueño invitó al escenario a Nico Sattler y “Chino” Herrera, de Q’ Lokura, para interpretar juntos Amor Salvaje y La ley y la trampa.
La presencia de Q’ Lokura también fue uno de los puntos álgidos de la noche. En pleno auge de popularidad, Herrera y Sattler ofrecieron un espectáculo que se extendió hasta las 5:30 de la madrugada, transformando el campo del anfiteatro en una inmensa pista de baile con sus hits más celebrados.
La noche arrancó con la energía de Piko Frank y Agustín Fakelmann, quienes calentaron el ambiente con su talento joven. Posteriormente, Nicolás Membriani, el payador del festival, llenó de tradición el escenario con coplas y poesía gaucha junto a su fogón. Los «Cuatro de Córdoba» continuaron la celebración con clásicos del folklore en ritmo de gato, zamba y chacarera, logrando ovaciones del público. Jessica Benavídez cautivó con su dulce voz y se sintió como en casa en una noche colmada de emociones.
El «Latido de la Noche» y la esencia tucumana
El reconocimiento al Latido de la Noche fue para Maira Lencina y Eugenia Colombres, dos jóvenes tucumanas que llegaron al Anfiteatro desde temprano, ingresando a las 11 de la mañana. Aguardaron con entusiasmo durante más de seis horas para ser parte de una velada cargada de fervor popular y alegría, que reflejó el espíritu vibrante del Festival de Jesús María.
Un festival que sigue haciendo historia
Jesús María volvió a reafirmar su lugar como uno de los eventos más importantes del país, combinando tradición y modernidad en una celebración que sigue latiendo en los corazones de miles de argentinos.