Luego de que la Cámara de Diputados aprobara por amplia mayoría el proyecto de financiamiento para las universidades nacionales, La Libertad Avanza (LLA) respondió con una advertencia tajante: “El superávit fiscal no se negocia”. A través de sus redes sociales, el oficialismo reafirmó su postura en contra de la iniciativa impulsada por bloques opositores y dejó entrever que el presidente Javier Milei podría vetarla si llega a convertirse en ley.
La iniciativa, que propone otorgar y actualizar partidas presupuestarias para las casas de altos estudios públicas del país, fue aprobada en general con 158 votos a favor, 75 en contra y 5 abstenciones. El resultado significó un revés para el Gobierno nacional, que intenta sostener su política de ajuste y equilibrio fiscal como eje central de su gestión.
El proyecto será girado ahora al Senado, donde el panorama parece favorable para su sanción definitiva. En ese escenario, el respaldo de varios gobernadores que anteriormente acompañaban al oficialismo se ha desdibujado, lo que pone en duda la capacidad de La Libertad Avanza para frenar el avance legislativo de medidas que van en dirección contraria a su programa económico.
Desde el entorno presidencial reiteran que no están dispuestos a ceder en el compromiso con el superávit, uno de los pilares discursivos y políticos de Javier Milei desde que asumió. De concretarse la aprobación en la Cámara alta, el veto presidencial aparece como una de las cartas más probables del Ejecutivo para impedir la implementación de la ley.