Después de una intensa gira internacional, Lionel Messi llegó este miércoles a la Argentina para pasar las fiestas de fin de año junto a su familia. El astro aterrizó a las 10:03 de la mañana en el Aeropuerto Internacional de Sauce Viejo, en la provincia de Santa Fe, procedente de Miami y a bordo de un vuelo privado.
Messi viajó acompañado por su pareja, Antonela Roccuzzo, y sus hijos Thiago, Mateo y Ciro. Debido a que el aeropuerto de Rosario permanece cerrado por obras de infraestructura desde septiembre, el arribo se concretó en Sauce Viejo. Desde allí, la familia se trasladó por vía terrestre unos 160 kilómetros hasta el barrio privado de Funes, donde el futbolista tiene su residencia.
Como ocurre cada vez que pisa suelo argentino, la llegada del campeón del mundo generó una verdadera revolución. Decenas de fanáticos se acercaron desde temprano a las inmediaciones del aeropuerto con camisetas de la Selección, banderas y carteles, con la ilusión de ver de cerca a su ídolo. Ante la creciente concurrencia, se dispuso un operativo especial de seguridad con personal policial y del aeropuerto.
El regreso al país marca el inicio de unos días de descanso para Messi, quien aprovechará el receso para celebrar Navidad y Año Nuevo en su ciudad natal, una tradición que mantiene desde hace años. Además, esta visita tendrá un condimento especial: el futbolista participará del casamiento de su hermana María Sol.
El rosarino llega tras cerrar una temporada destacada con Inter Miami, donde conquistó recientemente la MLS Cup, el primer título liguero en la historia del club. También viene de una visita multitudinaria a la India, donde fue ovacionado en varias ciudades, y ya piensa en un 2026 clave, con la mira puesta en el próximo Mundial junto a la Selección Argentina.
The Rolling Stones cancela su gira europea por problemas de salud de Keith Richards









