Un joven de 19 años fue entregado a la policía por sus padres luego de descuartizar el cuerpo de su novia, de 24, y quemarlo en una parrilla para luego descartarlo” en la ruta, en un brutal femicidio ocurrido la ciudad de San Fernando del Valle de Catamarca. El espeluznante crimen fue cometido por Naim Vera, hijo de un reconocido médico cirujano y una kinesióloga, y tuvo como víctima a su novia, Brenda Micaela Gordillo. Tras quemar los restos de la joven, el asesino esparció parte de los restos en un contenedor y en sectores aledaños a la ruta provincial 4. Luego, contó lo que había hecho a un amigo y finalmente a sus padres, el cirujano Oscar Vera y la kinesióloga Marcela Menem, quienes decidieron llevarlo a la Brigada de Investigaciones de la Policía local, donde se entregó. El espeluznante hecho se produjo entre las 4 y las 8 del domingo en un departamento situado en Ayacucho 68. El fiscal de turno, Hugo Costilla, dijo que en la autopsia al cuerpo se determinó que la joven murió asfixiada con un trapo en la boca y no por las lesiones sufridas al supuestamente caer por la escalera. Mediante el mismo estudio forense, los pesquisas descartaron que Gordillo estuviera embarazada. De acuerdo a lo observado en redes, el femicida usaba Twitter para repudiar la violencia en contra las mujeres.
Además, Costilla ordenó un allanamiento a la casa de Vera en busca de evidencias y el traslado del sospechoso a un centro asistencial para que sea cometido a análisis de sangre con el fin de constatar si estaba bajo el efecto de las drogas. Paralelamente, el colectivo Ni Una Menos de Catamarca realizó una marcha para pedir Justicia por Micaela.
Por otro lado, el observatorio Ahora que sí nos ven señaló que en lo que va de 2020 se sucedieron 63 femicidios, uno cada 23 horas. Del total, al menos el 66 % de los asesinatos fueron a manos de parejas o exparejas.
Macabro crimen
En tanto, una niña de ocho años fue encontrada muerta ayer en una vivienda de la localidad bonaerense de Lobos, en la que reside un primo de la menor, un joven de 22 que fue detenido como sospechoso de haberla asesinado. Según voceros policiales, el cuerpo de la nena tenía signos de haber recibido golpes y haber sido incinerada. El sospechoso, identificado como Sergio Oliveira, fue encontrado en una vivienda de la vecina localidad de Roque Pérez, en la casa de familiares. Me mandé una cagada, me mandé una cagada. No la pude salvar”, sostuvo el sospechoso en el momento de la detención. Durante la mañana del domingo, el acusado pasó a buscar a la niña por la casa de sus padres para llevarla a su propiedad, con la propuesta de jugar con uno de sus hijos. Sin embargo, al ver que no regresaban, la madre de la nena se presentó en la comisaría para hacer la denuncia.