El servicio de mensajería instantánea WhatsApp, propiedad de Facebook, actualizará sus condiciones de uso desde el mes próximo. Los usuarios de la aplicación móvil recibieron en los últimos días una notificación y aunque ahora se pueda colocar ahora no” en el mensaje emergente, desde el 8 de febrero será obligatorio aceptar las condiciones y la política de privacidad para continuar utilizando el servicio. A grandes rasgos, los principales cambios se basan en una mayor integración entre WhatsApp y la red social Facebook.
La empresa de Mark Zuckerberg podrá acceder a toda la información que el usuario tenga en Whatsapp como el registro de la cuenta (número de télefono), datos de operaciones, información relacionada con el servicio y sobre interacciones con otros servicios de Facebook, datos del celular y la dirección IP del aparato. Por otro lado, señala que no sólo recopilará información del usuario principal, sino también de sus contactos o terceras personas. Dicha información será reunida cuando los otros cibernautas tengan interacción con el usuario principal, como conversaciones en grupos, reportes o por los proveedores de servicios de otras empresas distintas a Facebook.
WhatsApp explica que la recopilación de datos tiene como finalidad operar y proporcionar sus servicios, como lo son soporte técnico, completar compras o transacciones para mejorar, corregir y personalizar nuestros servicios, así como conectarlos con los productos de las empresas de Facebook”. Además, la empresa señala que usará la información para entender cómo se usan sus servicios, para evaluarlos y mejorarlos, realizando investigaciones, así como desarrollando nuevos servicios y funciones o llevar a cabo actividades para resolver problemas de la aplicación.
De forma automática, WhatsApp también recopila información sobre la actividad del usuario en la aplicación (ajustes, interacción, frecuencia), de diagnóstico de servicio, o del dispositivo y la conexión (modelo, sistema operativo, nivel de carga de la batería, zona horaria, dirección IP).
También instala ‘cookies’ para mejorar la navegación, entender cómo se usan los servicios y personalizarlos. Con la entrada en vigor del reglamento general de protección de datos de la Unión Europea en 2018, WhatsApp adaptó la recopilación de datos, el intercambio y su uso a la nueva normativa.
Tal como señala en la notificación, la compañía exige la aceptación de las nuevas políticas para poder seguir utilizando el servicio de mensajería, y remite a su centro de ayuda en el caso de que los usuarios no estén de acuerdo y quieran dar de baja su cuenta.