¿Alguna vez te has preguntado si tu perro es zurdo o diestro? Aunque mucha gente lo desconozca, los seres humanos no somos los únicos animales que se clasifican en diestros y zurdos. Hoy sabemos que los perros también se diferencian en estas categorías en función de la pata que utilizan de manera preferente e incluso pueden ser ambidiestros.
Según varios estudios, el porcentaje de perros diestros y zurdos es más equitativo que en el caso de las personas, pues aproximadamente la mitad de los perros prefieren utilizar su pata derecha a la hora de realizar ciertos movimientos, mientras que la otra mitad se siente más cómoda empleando la izquierda.
Sucede que el cerebro de los canes también se encuentra dividido en dos hemisferios, cada uno de los cuales se encarga del procesamiento de unas funciones motoras y cognitivas específicas. En función de cuál sea el hemisferio dominante del perro, este tendrá preferencia por utilizar una pata u otra a la hora de realizar ciertas actividades o movimientos.
De esta manera, si el animal tiende a emplear la pata derecha para, por ejemplo, golpear objetos, jugar o empezar a caminar es porque su hemisferio dominante es el izquierdo y en este caso el perro se considera diestro. Por el contrario, si la pata de preferencia del can es la izquierda, el hemisferio que predomina es el derecho y estamos ante un perro zurdo.
Una de las principales diferencias entre perros y humanos en cuanto a la lateralidad cerebral la encontramos en el porcentaje de población zurda y diestra. Aproximadamente el 90 % de la población humana es diestra, mientras que solo un 10 % se considera zurda, existiendo muy pocas personas ambidiestras a nivel mundial.
Sin embargo, y según los estudios actuales, cuando hablamos de perros encontramos que aproximadamente la mitad de la población canina es diestra y la otra mitad zurda, siendo frecuentes los casos de animales ambidiestros, es decir, perros que utilizan ambas patas indistintamente y con la misma destreza.
Además, de acuerdo con varias investigaciones mientras que las perras son más propensas a utilizar la pata derecha, es decir, a ser diestras, los perros son mayoritariamente zurdos, lo que podría indicar que las hormonas sexuales ejercen influencia sobre la lateralidad cerebral. No obstante, no todos los estudios han sido capaces de corroborar esta afirmación.
Diferencias entre perros zurdos y diestros
Hoy en día podemos encontrar publicado un gran número de estudios que se han dedicado a investigar la existencia de posibles diferencias a nivel conductual y emocional entre perros zurdos y diestros.
A pesar de que algunos de ellos han obtenido resultados muy reveladores, todavía es necesario indagar más en este asunto, ya que para poder afirmar que la lateralidad cerebral influye realmente en la salud física, emocional o comportamental de los perros se debe contar con muestras muy grandes de animales que, además, no deben estar previamente condicionados al uso de una u otra pata.
Según algunas investigaciones dedicadas al estudio de la lateralidad cerebral canina, los perros zurdos son mayoritariamente machos y presentan un mayor número de linfocitos totales en su sistema inmunitario, según un estudio inmunológico publicado en el año 2004.
En lo referente a su comportamiento, los perros zurdos no obtuvieron resultados significativos en los tests de problemas conductuales, por lo que la lateralidad cerebral no parece tener una relación consistente con la aparición de este tipo de problemas.
Los canes diestros son, en su mayoría, hembras y poseen un mayor número tanto de granulocitos como de γ-globulinas. En el estudio que compara la lateralidad cerebral con la existencia de problemas de comportamiento solo se encontró una correlación positiva entre el uso preferente de la pata derecha y un aumento de la agresividad hacia personas desconocidas, aunque esto no resulta concluyente.
Aunque existen menos evidencias acerca de los perros ambidiestros, uno de los estudios más destacados sobre lateralidad y comportamiento encontró que los perros ambidiestros presentan, en comparación con los animales zurdos y diestros, unas conductas más reactivas y exageradas ante ciertos estímulos como el sonido intenso de tormentas eléctricas o de fuegos artificiales. Esto podría indicar que la reactividad va asociada con una menor fuerza de lateralidad cerebral.
¿Mi perro es zurdo o diestro?
A estas alturas te estarás preguntando si tu perro es zurdo o diestro y la buena noticia es que es bastante fácil determinarlo a través de unas pruebas muy sencillas que se pueden realizar en casa.
Pedirle al perro que te dé la pata: este ejercicio puede resultar muy obvio, pero es útil para conocer si tu perro muestra una clara preferencia por darte su pata derecha o la izquierda cuando se lo pides. Para este ejercicio es necesario que el perro conozca la orden y que no le hayas enseñado solo a levantar una pata en específico.
Esconder comida: Se debe tomar algo de comida con la mano y cerrar el puño, situándolo frente a la nariz de tu perro. Seguramente el animal tratará de conseguir la comida lamiendo o mordisqueando tu mano y llegará un punto en el que se frustrará un poco y empezará a golpear tu puño con sus patas. Es importante observar cuál utiliza con más frecuencia para intentar conseguir el alimento. Para este ejercicio también puedes meter la comida en un juguete interactivo y observar si lo empuja con alguna pata en particular.
Jugar al tira y afloja: Con un juguete de cuerda, es habitual que el perro trate de arrebatártelo sujetándolo con una de sus patas o golpeándote con ella para que sueltes la cuerda. La pata que tienda a utilizar te dará una pista acerca de su lateralidad cerebral (es decir, de si es zurdo o diestro).
Ponerle algo molesto en la cara: para este ejercicio tendrás que pegar una pegatina en la frente de tu perro o bien ponerle una gorra u otro objeto sobre la cabeza. El animal se sentirá molesto y tratará de quitárselo con una de sus patas. Si tu peludo no está habituado al uso del bozal o no le gusta llevarlo, también puedes utilizar esto para observar con qué pata se lo intenta quitar.
Hacerlo caminar o bajar escaleras: cuando el perro esté en reposo, colocate unos metros delante de él y llámale por su nombre, fijándote con qué pata comienza a andar. Otra opción es hacerle bajar o subir escaleras para observar con qué pata inicia el movimiento.
Ofrecerle un snack masticable: muchos perros sujetan sus snacks o sus juguetes con sus patas mientras los mastican para evitar que se muevan. Fájate si tu perro lo hace y, si es así, observa qué pata coloca encima con mayor frecuencia.
Debes repetir todas las pruebas varias veces y apuntar qué pata predomina en cada uno de los ensayos. Si en todas o en la gran mayoría de las actividades el perro utiliza preferentemente la pata derecha significa que es diestro, mientras que si tiende a emplear más la pata izquierda, es zurdo.
No obstante, también puede ocurrir que tu perro utilice unas veces una pata y otras veces la otra de forma totalmente indistinta y en este caso ¡tu perro es ambidiestro!