El gobierno de Brasil condenó el “desprecio a los derechos fundamentales” de 88 brasileños deportados de Estados Unidos que fueron esposados durante el viaje, según un comunicado del Ejecutivo de Lula da Silva.
El ministerio brasileño de Justicia ordenó a las autoridades estadounidenses la “inmediata retirada de las esposas” cuando el avión con los expulsados aterrizó en Manaos (norte), en repudio al “flagrante desprecio a los derechos fundamentales” de sus ciudadanos, informó en una nota oficial.
Una fuente del gobierno brasileño explicó a la AFP que esta deportación “no guarda una relación directa” con la operación contra inmigrantes ilegales iniciada en Estados Unidos tras la asunción el 20 de enero de Donald Trump.
“Este vuelo se inserta en otro contexto: un entendimiento bilateral entre Brasil y Estados Unidos, de 2017, que permanece en vigor”, dijo la fuente. En la nota oficial, las autoridades de Brasil enfatizaron que “la dignidad de la persona humana” es “uno de los pilares del estado democrático de derecho” y configura “valores innegociables”.