El presidente de Panamá, Raúl Mulino, ratificó ayer la postura del país, luego de las palabras de Donald Trump en su acto de asunción este lunes, en las que aseguró que Estados Unidos va a “tomar de vuelta” el Canal de Panamá. El canal de Panamá no fue “una concesión ni una dádiva” de Estados Unidos, aseguró el mandatario ayer en el Foro de Davos, tras la amenaza de su par estadounidense para “retomar” el control de la vía interoceánica.
En una mesa redonda celebrada en el Foro Económico Mundial, que tiene lugar en Suiza, Mulino rechazó los dichos del magnate. “Primero por falso y segundo porque el Canal de Panamá es de Panamá y seguirá siendo de Panamá. El canal de Panamá no fue una concesión ni una dádiva que hizo los Estados Unidos. Panamá sigue adelante, a Panamá no los distraen este tipo de pronunciamientos”, remarcó.
En su discurso de asunción, el presidente norteamericano reiteró su intención de tomar el control de esta vía interoceánica. “China está operando el canal de Panamá y nosotros no se lo dimos a China. Se lo dimos a Panamá y vamos a recuperarlo”, dijo Trump.
Sin embargo, el presidente de Panamá sostuvo que el canal “no fue una concesión de nadie” sino el resultado de luchas populares y de los tratados que firmó en 1977 el entonces presidente Jimmy Carter, conforme a los cuales el control de la vía fue entregada a Panamá en diciembre de 1999.
Por su parte, China insistió de nuevo en que “no participa en la gestión y la operación del canal y nunca ha interferido en los asuntos del canal”, según la portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores, Mao Ning.