En medio de una crisis energética por la invasión de Ucrania y con los Gobiernos europeos preocupados por la llegada del invierno, el Ejecutivo francés hizo oficial su decisión de renacionalizar totalmente la empresa eléctrica EDF.
Para ello, desembolsará un total de 9.700 millones de euros para nacionalizar la compañía de la que ya posee el 84% de las acciones. El 1,5% lo tienen los empleados y el resto está en manos privadas. Hoy, el Estado busca tener el 100%.
Según precisó el Ministro francés de Economía, Bruno Le Maire, la renacionalización de EDF deberá estar terminada de “aquí a septiembre para que la compañía de suministros eléctricos esté en condiciones de aplicar el programa nuevo nuclear y desplegar los dispositivos de las energías renovables”.
Actualmente, la situación de la empresa no es buena: acarrea deudas millonarias, atrasos considerables en las inversiones y poco mantenimiento. La total presencia estatal podría ser una lumbre de esperanza.