India se convertirá este año en el país más poblado del mundo, superando a China por 2,9 millones para mediados de 2023, mientras que la población mundial superará los 8.000 millones y comenzará a disminuir a fines de este siglo tras sobrepasar los 10.000 millones, según datos y proyecciones publicados ayer por Naciones Unidas.
India alcanzará 1.428,6 millones de habitantes a mitad de año, por encima de los 1.425,7 millones de China, según el informe del Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa) sobre el Estado de la Población Mundial.
Este hecho se produce por un doble fenómeno. Por un lado, la creciente industrialización y mejora de la atención sanitaria y procesos de producción de alimentos en India, que determinó un crecimiento demográfico en esa nación, y el paralelo descenso de la población china, producto en parte de su política de hijo único, que durante más de 35 años limitó a las parejas.
China puso fin en 2016 a esta estricta política impuesta en los años 1980 por temor a una sobrepoblación, y en 2021 comenzó a permitir a las parejas tener tres hijos, pero aún así, las proyecciones indican un continuo declive demográfico ante la caída en la tasa de natalidad y el envejecimiento de su fuerza laboral.
La población del gigante asiático se redujo en 2022 a 1.411 millones de habitantes, unos 850.000 menos que 2021, según anunció a principios de enero la Oficina Nacional de Estadística de China (NBS).
China ha sido históricamente visto como el país más populoso del mundo desde la caída del Imperio Romano. Desde 1961, cuando una hambruna mató a decenas de millones de personas en todo el país, no había experimentado una merma de su población.
India, por su parte, no posee datos recientes sobre el número de sus habitantes porque no ha realizado un censo desde 2011, ya que el relevamiento programado para 2021 fue aplazado por la pandemia de coronavirus.
Para su realización, Nueva Delhi enfrenta trabas logísticas y resistencia política, por lo cual parece poco probable que se efectivice a corto plazo.
Los críticos acusan al Gobierno del primer ministro Narendra Modi de aplazar deliberadamente el censo para ocultar información polémica, como el desempleo, antes de las elecciones nacionales de 2024.
La economía india lucha por brindar empleo a los millones de jóvenes que ingresan cada año a la fuerza laboral. La mitad de la población del país tiene menos de 30 años.
El Gobierno, por otra parte, enfrenta el desafío de suministrar electricidad, alimentos y vivienda a su creciente población.
Según el Pew Research Centre, la población india ha aumentado en más de 1.000 millones de personas desde 1950, año en que la ONU comenzó a recopilar datos poblacionales.
Nueva Delhi y Beijing compiten por su influencia en Asia y en la escena internacional, y el estatus de país «más poblado del mundo» podría reforzar a India como potencia en ascenso, a la que Occidente evalúa como una alternativa para contrarrestar la influencia de China.
Esa dominación demográfica podría servirle de argumento a Nueva Delhi para conseguir un asiento permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU, algo que India desea desde hace tiempo.
El informe del órgano de la ONU señala que la población mundial alcanzará 8.045 millones de personas a mediados de año.
Otros países, especialmente en Europa y Asia, apuntan a declives demográficos en las próximas décadas, según otras cifras de la ONU publicadas en julio, las cuales anticipan cómo se comportará la población mundial hasta el año 2100.
Ocho naciones de más de 10 millones de habitantes, en su mayoría en Europa, tuvieron declives en su número de habitantes la última década.
Por el contrario, la población de África deberá aumentar de 1.400 millones en la actualidad a 3.900 millones en 2100. Ese continente será el hogar de 38% de los habitantes mundiales, por encima del 18% en la actualidad.
Japón también enfrenta un declive debido al envejecimiento de su población, que lo llevó a una reducción de tres millones de habitantes entre 2011 y 2021.
En tanto, la población del planeta en su conjunto declinará en los años 2090 tras alcanzar la cifra máxima de 10.400 millones, según la ONU.
Unfpa señaló asimismo que está muy extendida la idea de que la población mundial se ha vuelto excesiva, tras haber superado los 8.000 millones de personas.
«Debería ser una razón para felicitarse», porque el número demuestra «los avances históricos de la humanidad en los ámbitos de la medicina, la ciencia, la salud, la agricultura y la educación», dijo la directora ejecutiva de Unfpa, la doctora Natalia Kanem.
Agregó que si bien el total de seres humanos alcanza niveles récord, «la tasa de fecundidad media mundial es la más baja que se recuerda», con un promedio de 2,3 niños por mujer, y dos tercios de la población mundial viviendo en países con baja tasa de fecundidad».
«Es la primera vez en la historia de la humanidad» que la población no aumenta en el conjunto de países del planeta, según Kanem.
Además, afirmó que la población mundial se está «reorganizando rápidamente» y que la clasificación de los países más populosos cambiará en los próximos 25 años.
La esperanza de vida, en tanto, es de 71 años para los hombres y de 76 para las mujeres: «Desde 1990, la esperanza de vida media ha aumentado unos diez años», apuntó Kanem.
Una cuarta parte de la población mundial tiene 14 años o menos, el 65% está entre los 15 y los 64 años y el 10% tiene 65 años o más.
Otro aspecto relevante del documento es que llama a concentrarse en respetar el derecho de las mujeres a disponer libremente de su cuerpo.
Además del aumento de la población, el mundo debería alarmarse también ante las dificultades de las mujeres para ejercer sus derechos en materia de procreación, estimó el organismo, que llama a repensar radicalmente la demografía, al constatar que los gobiernos adoptan cada vez más políticas destinadas a incrementar, reducir o mantener las tasas de fecundidad.
Estos esfuerzos son a menudo ineficaces, dado que la cuestión no es tanto saber si la población mundial es excesiva, sino ver si «cada cual puede ejercer su derecho fundamental a elegir el número de hijos» y el período transcurrido entre uno y otro nacimiento, señaló.
En el 44% de los casos, las mujeres «no pueden elegir su método de anticoncepción o su atención sanitaria, o decidir si quieren tener relaciones sexuales y con quién. Y en todo el mundo, casi la mitad de los embarazos son no deseados», alertó Kanem, quien precisó que medio millón de niñas de entre 10 y 14 años dan a luz.
El mensaje de la ONU llega en medio de repetidos intentos en Estados Unidos por restringir el derecho al aborto.
Por otro lado, Kanem se refirió a la «falsa» creencia de que el calentamiento global se debe a la proliferación de los seres humanos en un planeta con recursos limitados, cuando en realidad, los países con mayor tasa de fecundidad son los que menos contaminan y, al mismo tiempo, los que más sufren sus consecuencias.
El informe menciona a Níger, Chad, República Democrática del Congo (RDC), Somalia, Mali y República Centroafricana como los países con la tasa de fecundidad más elevada.
Las tasas más bajas, en tanto, se observan en Corea del Sur, Hong Kong, Singapur, Macao, San Marino, Aruba y China.
