Israel pidió ayer a las “naciones civilizadas” que rechacen la orden de detención contra el primer ministro, Benjamín Netanyahu, del fiscal del Tribunal Penal Internacional (TPI) de La Haya por crímenes de guerra y contra la humanidad. “Hacemos un llamado a las naciones que desprecian a los terroristas y a cualquiera que los apoye, a apoyar a Israel. Deben condenar abiertamente este paso”, dijo una portavoz del Gobierno israelí.
Por su parte, el presidente estadounidense Joe Biden salió en defensa de Israel y tachó de “escandalosa” la petición del fiscal, además de rechazar que Israel esté cometiendo un genocidio en Gaza. En tanto, la Comisión Europea recalcó su respeto a la “independencia” del TPI. “La Unión Europea respeta la independencia de una institución internacional independiente que trabaja en la investigación de los crímenes más graves, que trata de evitar que haya impunidad en las violaciones que caen bajo su competencia. Todos los países que han suscrito el estatuto tienen la obligación de cumplir (con sus decisiones)”, dijo el portavoz de Exteriores de la Comisión Europea, Peter Stano.
En contrapartida, Francia fue el primer país que aceptó la orden de arresto contra Netanyahu, Gallant y los tres líderes de Hamás. A diferencia de Estados Unidos, París publicó el martes un comunicado de prensa, en el que subrayó su compromiso con la independencia de la institución internacional. “Francia apoya a la Corte Penal Internacional, su independencia y la lucha contra la impunidad en todas las situaciones”, escribió la diplomacia francesa.
“El 7 de octubre, Francia condenó las masacres antisemitas perpetradas por Hamás. Este grupo terrorista se atribuyó la responsabilidad de ataques bárbaros contra civiles, acompañados de actos de tortura y violencia sexual que él mismo documentó, incluso retransmitiéndolos y celebrándolos”, continúa París. Respecto de Israel, “Francia lleva muchos meses advirtiendo sobre el imperativo de un estricto cumplimiento del derecho internacional humanitario y, en particular, sobre el carácter inaceptable de las pérdidas civiles en la Franja de Gaza y el insuficiente acceso humanitario”, añade el comunicado. Y subraya que una “solución política duradera” es la “única” manera de “restaurar un horizonte de paz”.