El presidente de la COP28, Sultan Ahmed al Jaber, ministro de Industria de los Emiratos Árabes Unidos (EAU), había querido concluir la reunión esta mañana, pero muchos países siguen decepcionados porque el borrador de texto de 21 páginas no va lo suficientemente lejos en cuanto a los compromisos para poner fin al uso de combustibles fósiles.
El borrador del documento publicado ayer solo menciona una «reducción» en el consumo y la producción de combustibles fósiles, en lugar de una «eliminación» gradual. En una versión anterior, todavía se mencionaba la eliminación gradual como una de varias opciones.
Además de definir si se intentará «reducir» o «eliminar» progresivamente el uso del petróleo, el gas y el carbón, los negociadores buscarán establecer si estas medidas serán opcionales o un compromiso real.
Esta mañana, al inicio de la jornada, un grupo de activistas recibió a los negociadores en silencio, de brazos cruzados y formando una cadena humana en el ingreso a la sala de debates del Centro de Exposiciones de Dubai, donde el desconcierto y las muestras de desazón reinaban en los pasillos, informó la agencia de noticias AFP.
Una fuente de la presidencia emiratí explicó, sin embargo, que todo eso formaba parte del juego negociador.
El papel de China y Estados Unidos, principales emisores de gases de efecto invernadero (GEI) del planeta, será determinante.
El director general de la COP28, Majid Al Suwaidi, señaló que la presidencia emiratí estaba trabajando en un nuevo borrador de acuerdo basado en las «líneas rojas» expresadas por los países con el objetivo de «llegar a un consenso».
El texto es «claramente insuficiente», evaluó la ministra de Transición Ecológica española, Teresa Ribera, que ostenta la presidencia rotatoria de los ministros de la Unión Europea.
Ribera y el comisario europeo de Acción Climática, Wopke Hoekstra, se reunieron con el secretario general de la ONU, António Guterres, a primera hora de hoy, informaron fuentes oficiales europeas.
Aunque todas las miradas se centran en los combustibles fósiles, hay otros temas que plantean también mucho trabajo por delante, como fijar metas comunes sobre la adaptación al cambio climático, es decir, sintetizar las políticas que llevará adelante cada país para limitar las GEI y generar respuestas coordinadas que se adapten a los territorios, ecosistemas y comunidades vulnerables a los impactos del cambio climático.
«Hay varios escenarios por delante. En el mejor de los casos, las partes encuentran puntos de compromiso que reflejan el consenso», explicó Cassie Flynn, directora global de cambio climático del Programa de Desarrollo de la ONU.
«Otra opción, y lo hemos visto en otras negociaciones, es elaborar una lista de opciones que sea reportada a la siguiente COP», explicó en la entrevista.
La COP28 debería en principio cerrarse con una declaración votada por consenso, pero no hay un nuevo borrador sobre la mesa.
El objetivo del Acuerdo de París de lucha contra el cambio climático de 2015 era mantener el aumento de la temperatura mundial en un máximo de 1,5 ºC, idealmente.
El mundo aumentó sus GEI en 2023, y los expertos advierten que, de aquí a 2030, las NDC (Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional, es decir, los compromisos que asume cada país para contribuir al cumplimiento de los objetivos del Acuerdo de París) propuestas en Dubai solo representarán una tercera parte del sacrificio necesario.