La Primera Sala del Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil decidió este lunes, por unanimidad, mantener la orden de prisión preventiva contra el ex presidente Jair Bolsonaro (2019-2022), ratificando la medida decretada el 22 de noviembre por el juez Alexandre de Moraes, quien sustituyó la detención domiciliaria ante evidencias de riesgo de fuga.
Los jueces Flávio Dino, Cristiano Zanin y Cármen Lúcia acompañaron el voto del relator, por lo que Bolsonaro deberá continuar cumpliendo su pena en prisión.
El ex mandatario se encontraba en prisión domiciliaria, luego de haber sido condenado en septiembre a 27 años y tres meses de cárcel por su participación en una tentativa de golpe de Estado.
El pasado sábado, Moraes convirtió la medida en prisión preventiva después de que Bolsonaro intentara retirarse la tobillera electrónica, episodio que coincidió con la convocatoria de una vigilia frente a su residencia hecha por su hijo Flávio Bolsonaro.
Durante la audiencia de custodia del domingo, el ex presidente alegó que el intento de violar el dispositivo electrónico se debió a un episodio provocado por medicamentos psiquiátricos.
En su decisión, Moraes afirmó que la violación del control electrónico demostraba la intención de fuga y que esta podría verse facilitada por el tumulto generado por sus simpatizantes. También subrayó la “repetición del modus operandi” de Bolsonaro, consistente en movilizar a seguidores para generar confusión, y recordó que otros miembros de su círculo íntimo ya huyeron al exterior, entre ellos los diputados Alexandre Ramagem y Eduardo Bolsonaro.
Bolsonaro ha reiterado públicamente que “jamás” se someterá a prisión, lo que para el tribunal refleja un desafío abierto a la autoridad judicial. Los jueces Zanin y Cármen Lúcia votaron con el relator, sin presentar votos adicionales.
A pesar de la decisión, la defensa del ex presidente pidió “clemencia”, solicitando que se mantuviera la prisión domiciliaria por “razones humanitarias”, citando su frágil estado de salud: secuelas de la puñalada de 2018, múltiples cirugías, episodios de hipo persistente, dificultades respiratorias y un reciente diagnóstico de cáncer de piel.
El plazo para presentar nuevos recursos vence el próximo lunes, mientras el proceso judicial continúa avanzando.
El pronunciamiento de Lula da Silva
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva afirmó que la detención de Bolsonaro no afectará las relaciones bilaterales entre Brasil y Estados Unidos, subrayando que el país es soberano en sus decisiones judiciales.
“Trump tiene que saber que somos un país soberano, que nuestra Justicia decide y lo que se decide aquí está decidido”, declaró Lula tras la Cumbre del G20 realizada del 22 al 23 de noviembre en Johannesburgo, Sudáfrica.
“La Justicia decidió, él (Bolsonaro) va a cumplir la pena que la Justicia determinó y todo el mundo sabe lo que hizo”, agregó el mandatario.
Consultado ese mismo sábado, Donald Trump dijo no estar al tanto del arresto de Bolsonaro y, de ser cierto, consideró que “es una pena”.









