Ucrania cortó ayer el tránsito de gas ruso por su territorio a causa de la guerra con Rusia, causando gran preocupación en el este europeo. El gas ruso se ha suministrado a Europa a través de gasoductos que pasan por territorio ucraniano desde el fin de la Unión Soviética en 1991.
A finales de 2019, ambos países renovaron el acuerdo a través de un contrato de cinco años, que expiró ayer y que se había respetado pese a la guerra desencadenada por la invasión rusa de Ucrania el 24 de febrero de 2022. Pero ahora Kiev decidió no prolongarlo y ambas partes confirmaron que el gas había dejado de transitar definitivamente.
El fin del tránsito de gas ruso es “una de las mayores derrotas de Moscú”, celebró a su vez el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski. Aunque el continente europeo intenta romper su dependencia del gas ruso desde 2022, varios países de Europa oriental aún dependen de Moscú para suplir su demanda energética.
Antes de la guerra, Rusia suministraba casi el 40% del gas natural de tubería de la Unión Europea. Después de que comenzara la guerra, Rusia cortó la mayoría de los suministros a través de los ductos del Báltico y Bielorrusia-Polonia, citando disputas sobre una demanda de pago en rublos. El gasoducto del Báltico fue volado en un acto de sabotaje, pero los detalles del ataque siguen sin estar claros.
El corte ruso provocó una crisis energética en Europa. Alemania tuvo que desembolsar miles de millones de euros para establecer terminales flotantes para importar gas natural licuado que llega por barco, no por gasoducto.
Los usuarios redujeron su consumo ante unos precios disparados. Noruega y Estados Unidos llenaron el vacío, convirtiéndose en los dos mayores proveedores. La situación es crítica en Moldavia, fronteriza con Ucrania, que además debe lidiar con separatistas apoyados por Rusia. El diminuto país ya declaró el estado de emergencia por 60 días anticipando el corte ucraniano.
Fuerte ataque a Kiev en el comienzo de año
Rusia lanzó ayer un ataque aéreo contra el centro de Kiev en las primeras horas de 2025, informaron las autoridades ucranianas. El ataque, poco común en el corazón de la capital de Ucrania, se produjo apenas horas después de que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, prometiera en un mensaje de Año Nuevo que haría todo lo posible para poner fin a la guerra en los próximos 12 meses.
“Una persona ha muerto como resultado de un ataque enemigo en Kiev. El número de heridos ha aumentado a siete, incluidas dos mujeres embarazadas”, dijo la oficina del Fiscal General en una publicación en Telegram.
Las autoridades locales dijeron que el daño fue causado por la caída de escombros, lo que sugiere que los drones habían sido interceptados. Las autoridades ucranianas dijeron que los drones rusos apuntaron al distrito Pechersky de la capital, donde se encuentra el palacio presidencial y el barrio gubernamental.