Piden reemplazar los botones antipánico por tobilleras electrónicas

Piden reemplazar los botones antipánico por tobilleras electrónicas

La Federación Argentina de Sindicatos Policiales y Penitenciarios (Fasipp), junto a la Mesa Nacional Contra la Violencia Institucional de las Fuerzas de Seguridad, Derechos Humanos y Género, informó sobre la presentación de una nota dirigida al ministro de Justicia y Derechos Humanos, Germán Garavano, en la que se le solicita el reemplazo de la implementación del botón anti pánico para las víctimas de violencia de género, por el uso de la tobillera electrónica para controlar a los denunciados. Según las organizaciones, esto permitiría un mejor control sobre la situación.

El documento presentado al ministro, según la titular de ambos organismos, Fabiana Rearte, explica que “el uso del botón antipánico, no es un elemento que proteja a una víctima de violencia de ser asesinada, golpeada, secuestrada y hasta violada, ya que tiene diversas fallas, como por ejemplo, cuando se activa, entre lo que tarda el protocolo, comunicaciones etc. el victimario ya está en poder de la víctima y por lo general con graves consecuencias».

Asimismo, el buen funcionamiento del botón antipánico y su GPS puede variar según las condiciones climáticas, la batería, la cercanía de las antenas que proporcionan la señal y el funcionamiento de otros dispositivos cercanos, explica el documento.

En cambio, las tobilleras «son dispositivos de geo localización que permiten monitorear en tiempo real que las órdenes judiciales que establecen perímetros de protección sean cumplidas”, expresa la misiva enviada a Garavano.

“El sistema impone el uso de tobilleras electrónicas de geo localización que se le colocan al agresor y permiten brindar más seguridad a las mujeres víctimas de violencia de género, asegurando que no ingrese a las zonas fijadas por los magistrados que ordenan cada medida preventiva. Tanto el agresor como la víctima reciben además un aparato receptor que funciona como un teléfono celular con GPS” concluye.

Salir de la versión móvil