El viernes pasado, la Provincia ajustó los importes los de los Ingresos Brutos que los monostributistas deben pagar mensualmente de acuerdo a la categoría que le corresponde. Los nuevos valores representan incrementos de entre el 180% y el 240% sobre el impuesto, que es el que corresponde a la Provincia.
Al respecto, el diputado nacional por Córdoba y jefe de bloque radical, Rodrigo de Loredo, dijo: “El gobernador Llaryora, por decreto, le subió Ingresos Brutos a los monotributistas. Es un impuestazo en particular para los pequeños comerciantes y los asalariados informales de la provincia”.
Según De Loredo, el aumento del componente de Ingresos Brutos a los monotributistas impacta más en las categorías más bajas, por lo que calificó la suba como de una “regresividad total”. Y argumentó: “En la categoría más baja, el contribuyente paga más del doble en impuestos provinciales. En las categorías altas, la relación se invierte. En la Categoría H, monotributo paga $ 220.000 e Ingresos Brutos, $ 76.900. La carga fiscal se desplaza hacia el impuesto nacional en las categorías altas, denotando una progresividad en el monotributo, pero una marcada regresividad en Ingresos Brutos”.
Para el radical, el aumento es “inentendible en esta realidad” y “perverso en este contexto” y denunció que la Provincia “gasta de más, y le pasa la factura a los que menos tienen”.