Encabezado por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y su par de Defensa, Luis Petri, junto con el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, el Gobierno nacional puso en marcha hoy el Comité de Crisis en Rosario luego de un fin de semana de extrema violencia.
A partir de mañana la Casa Rosada enviará personal e infraestructura militar, encabezará un operativo de saturación callejera con agentes policiales, buscará junto a la Justicia de acusar a los detenidos de “terroristas”, enviará al Congreso una “ley antibandas”, y prometió avanzar contra el lavado de dinero y la portación de armas.
“En las próximas 24 horas estarán llegando personal de las FFAA, vehículos, transporte y logística”, anunció el ministro de Defensa, primero en hablar en la conferencia de prensa que las autoridades brindaron esta mañana.
Según el funcionario las fuerzas armadas darán “apoyo a la seguridad interior” siempre respetando la ley de Seguridad Interior, que le pone límites estricto a los militares para actuar dentro del territorio nacional. Petri justificó el operativo oficial ante la “intempestiva narcoterroristra” que sufre la ciudad.
“Las Fuerzas Armadas son garantes de la paz. Cuando la paz está en peligro, se hace necesario su auxilio en el marco de la ley de seguridad interior”, dijo Petri.
“Necesitamos terminar con el hormiguero y no agarrar hormiga por hormiga. Esto no es un problema de ganar, sino de hacerles la vida difícil, que no haya armas en las casas”, dijo Bullrich a su turno. Fue la ministra de Seguridad la que anunció que el Ejecutivo le va a pedir a la Justicia “la utilización de la ley antiterrorista” contra los narcos detenidos, lo que duplica las penas. Además dijo que se utilizará el uso de la figura del arrepentido.
En los últimos días hubo una ola de crímenes en Rosario con asesinatos perpetrados por las bandas narco que dominan la ciudad como respuesta a las medidas aplicadas por el gobierno local en las cárceles en las que están detenidos los integrantes de los clanes violentos.