El abogado constitucionalista Manuel García Mansilla defendió hoy ante la Comisión de Acuerdos del Senado su candidatura para integrar la Corte Suprema, oportunidad en que expresó su postura en favor de la alternancia en el poder, advirtió que la dolarización se transformaría en inconstitucional y dejó dudas sobre su posición sobre el aborto.
Se trata de uno de los dos candidatos propuesto por el presidente Javier Milei para para suplir la vacante que dejará en diciembre Juan Carlos Maqueda en el tribunal, y el otro es juez federal Ariel Lijo, que ya expuso el miércoles de la semana pasada.
La presentación de García Mansilla inició pasadas las 10 con una presentación en la que detalló su recorrido en el ámbito académico y en el derecho privado.
En ese pasaje introductorio, García Mansilla contó que vivió en diferentes provincias porque sus padres trabajaban en la administración de Parques Nacionales.
Según el letrado, ese recorrido por el interior de la Argentina le permitió conocer las diversas realidades del país con sus «distintas costumbres».
Para el académico «los jueces tienen la función principal de resolver causas judiciales concretas, aplicando el derecho vigente tal como ha sido sancionado por el Congreso y respetando siempre el texto y la estructura de la Constitución con todas sus reformas; y no apelando a sus convicciones personales siendo de índole moral, política y religiosa».
En esa línea discursiva, García Mansilla, que es decano de la Facultad de Derecho de la Universidad Austral, enfatizó que «los jueces no pueden aplicar sus convicciones a la hora de decidir casos concretos. Fomentar ese comportamiento anómalo es una forma inaceptable de liberarlos de los límites que la propia Constitución les impone a ellos», completó.
Para concluir y abrirle paso a las preguntas de la ciudadanía y de los senadores, García Mansilla aseguró que su única aspiración, en el caso de llegar a la Corte, es la de «servir» a la Argentina de tal manera que, al momento que le toque terminar con esas funciones, sus compatriotas lo «recuerden como un juez que obró con integridad, independencia e imparcialidad».
El primero en tomar el micrófono fue el senador libertario Francisco Paoltroni, uno de los fervientes combatientes que tiene el pliego de Ariel Lijo, y quien reflotó una de las preguntas que le hizo a Lijo la semana pasada sobre la alternancia en el poder en referencia a las décadas que lleva de mandato el gobernador Gildo Insfrán.
Al respecto, García Mansilla se excusó por la causa abierta pendiente de resolución que se tramita en la Corte Suprema sobre la reelección indefinida, pero no le esquivó por completo al tema y lo bordeó con sutileza al sostener que la «reelección indefinida tiene un problema con el régimen republicano de gobierno».
La dolarización, bandera de campaña de Milei, volvió a colarse entre las preguntas, y el encargado de plasmarla fue el senador y titular de la UCR, Martín Lousteau, en una pregunta que también le había realizado días atrás a Lijo.
«Publiqué dos trabajos sobre el tema. Tenía que ver con un momento durante la campaña presidencial donde era un tema en discusión, más allá de que no había un proyecto. Planteamos que para saber si la dolarización es constitucional o no hay que ver un proyecto. Si para dolarizar hay que confiscar todos los depósitos, es inconstitucional», definió el candidato a la Corte.
Y añadió: «Puede ser constitucional o no, dependiendo de cómo se haga. Es el Congreso el que puede tomar esa decisión. Mi rol hasta hoy es académico; y los académicos tienen una obligación de contribuir al debate público sumando argumentos. En ese momento, me pareció que obturar una discusión y desecharla de plano no era correcto», argumentó.
La apreciación de García-Masilla tiene raigambre en la declaración del actual presidente de la Corte Suprema, Horacio Rosatti, quien aseguró, en medio de la campaña presidencial del 2023, que «si la dolarización elimina el peso es inconstitucional».
Sobre el aborto, tema por el cual el letrado se expresó negativamente durante las audiencias públicas de 2018, y por el que este miércoles fue interpelado por Lousteau y la senadora de kirchnerista Anabel Fernández Sagasti, sostuvo que para hablar del tema es importante «separar entre legalización y penalización».
Según García Mansilla, «es indispensable que el Congreso derogue las leyes que se contraponen con lo que se está sancionando».
«Hay 13 constituciones provinciales que consideran el derecho a la vida y habría que hacer un análisis de compatibilidad con esas constituciones. Veo un conflicto entre normas de distintas jerarquías», añadió.
Por su parte, el senador kirchnerista Omar Parrilli consideró que el postulado por Milei para integrar la Corte tiene un sesgo antiperonista y citó un artículo periodístico en el que el abogado defendió a los integrantes de la Corte por la embestida del kirchnerismo a través del juicio político impulsado en 2022.
«Usted no es un juez independiente, usted es un juez del macrismo y camino a consolidar la mayoría automática, que alguna vez criticó», le espetó Parrilli.
A su vez, el legislador neuquino le preguntó a García Mansilla quién le había ofrecido su postulación a la Corte, a lo que el letrado respondió que fueron el asesor presidencial Santiago Caputo y el viceministro de Justicia, Sebastián Amerio. Además, el letrado afirmó que no conoce al presidente Javier Milei.
Sobre el final de la jornada, Tagliaferri dejó habilitada la firma del pliego de García-Mansilla, pero tanto su despacho como el de Lijo aún no reunían el consenso necesario para conseguir las nueve rúbricas, sobre un total de 17, que se necesitan para habilitar su tratamiento en el recinto del Senado.