Más de 100 intendentes argentinos firmaron hoy, en la Ciudad de Buenos Aires, un compromiso de acciones frente al cambio climático que incluye medidas para limitar el aumento de la temperatura a 1,5°C, alcanzar la carbono neutralidad en 2050 y la cumplir con la publicación de inventarios de gases de efecto invernadero y evaluaciones de riesgo.
Entre los compromisos a los que adhirieron las dirigentes argentinos figura «el reconocimiento de la emergencia climática y la relevancia de las ciudades en su abordaje», en tanto que la declaración también contempla la publicación de datos climáticos y la incorporación de estrategias para alentar la creación de empleos verdes.
El intendente Martín Llaryora disertó en la Cumbre Mundial de Alcaldes “C40”, que se desarrolla en la ciudad de Buenos Aires del 19 al 21 de octubre.
El encuentro, que se realiza cada tres años, reúne a representantes de todo el mundo para discutir acerca del cambio climático, sus efectos y el rol que tienen los gobiernos locales en la lucha para enfrentarlo.
C40 es una red de alcaldes de casi 100 ciudades líderes en el mundo, que toman medidas urgentes para enfrentar la crisis climática y crear un futuro donde todos puedan prosperar.
Los líderes que participan representan a más de 582 millones de personas y una quinta parte de la economía mundial.
Llaryora disertó en el panel “La cooperación climática orientada a las finanzas sostenibles entre ciudades”, que el intendente compartió junto a la alcaldesa de Copenhague, Sophie Hæstorp Andersen; el alcalde de Curitiba, Rafael Greca y el intendente de San Salvador de Jujuy, Raúl Jorge; con la coordinación del ministro de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri.
En este marco, el intendente repasó las medidas y acciones concretas tomadas por su gestión en materia ambiental, que posicionan a la ciudad de Córdoba como líder regional, a la vanguardia en materia de innovación y sustentabilidad para alcanzar una ciudad vivible.
Entre ellas, mencionó la recuperación del Jardín Botánico, el Observatorio Ambiental y la Universidad Libre del Ambiente; junto con la creación del primer Juzgado de Faltas Ambiental, el Instituto de Protección Ambiental (IPA), el ente BioCórdoba, la primera Escuela de Economía Circular y el primer Parque Industrial de la Economía Circular.
Luego explicó que el eje central de la estrategia desarrollada por su gestión se basa en el desarrollo del modelo de las 4C, como se conoce a las economías Circular, del Conocimiento, Creativa y de Economía Comunitaria.
“En la ciudad de Córdoba estamos impulsado y liderando el proceso de transformación de una economía lineal a una circular», definió Llaryora.
“Nosotros estamos generando una fuerte política ambiental y un liderazgo indiscutido en materia de Economía Circular porque creemos que no habrá lugar para las ciudades que no adopten una política ambiental. Aquellas ciudades que no integren los paradigmas de la Economía Circular y la Economía Verde perderán oportunidades”, agregó el intendente.
El posicionamiento de Córdoba se ve reflejado en reconocimientos por parte de prestigiosos organismos internacionales, en muchos casos estos se traducen en nuevas vías de financiamiento que permiten aplicar políticas públicas en materia ambiental.
Entre ellos se destacan la calificación de “Ciudad Emergente”, otorgada por el BID en su reporte de medición de Ciudades inteligentes; la distinción por parte del Foro Económico Mundial que colocó a Córdoba como una de las 36 ciudades del mundo pioneras en el camino a ser Ciudades Inteligentes y el reconocimiento de Google por la herramienta de “Gestión Ambiental” desarrollada por el municipio capitalino.
Además, UNICEF destacó a las supermanzanas creadas por la actual gestión como un espacio que mejora la vida de los ciudadanos, mientras que la Unión Europea premió a la ciudad con una subvención de más de tres millones de euros por el Proyecto Respira Córdoba para la recuperación del área central.