El debate protagonizado por los cinco candidatos presidenciales en carrera, realizado el domingo en el Forum de Santiago del Estero, siguió generando repercusiones ayer luego de alcanzar un pico de 44 puntos de rating, sumando a todos los canales de televisión que lo transmitieron.
Ante tal expectativa -la audiencia superó a todos los programas de la noche del domingo-, los postulantes salieron a reivindicar sus intervenciones en el debate y a ratificar las ideas que plantearon, incluidas las más polémicas. Ocurre que volverán a enfrentarse en un nuevo debate el próximo domingo en la Universidad de Buenos Aires (UBA) y, en caso de haber ballottage, los dos protagonistas se verán frente a frente el 12 de noviembre.
Por tanto, la disputa del domingo fue apenas el inicio de una larga confrontación que seguirá candente en las próximas semanas. Por eso llamó la atención que la candidata de Juntos por el Cambio (JxC), Patricia Bullrich, admitiera que le resultó “difícil llevar adelante” su participación el domingo por “una gripe fuertísima que me tuvo a mal traer”, a la vez que confió en que en la próxima ronda estará “mejor”. “Voy a mantener mi firmeza, mis ideas y aquellas cosas que creo que nos diferencian”, sostuvo Bullrich en declaraciones radiales, donde dijo haberse sentido “bien” en el debate y consideró que tuvo “argumentos claros”. Además, elogió como un logro el hecho de que Sergio Massa (Unión por la Patria) y Javier Milei (La libertad Avanza) “intentaron polarizar y no pudieron”.
Bullrich aseguró además que “nadie le cree a Milei” cuando dice que ella es “más casta” que el dirigente del gremio gastronómico Luis Barrionuevo, aliado del libertario, porque “todo el mundo sabe de mi carácter luchador, que me enfrenté al sindicalismo y los momentos difíciles y que salí airosa de todas las gestiones en las que estuve”. Por último, se jactó de haber sido “la única candidata competitiva” en haber mencionado el escándalo que protagonizó el dirigente peronista Martín Insaurralde, a la vez que remarcó que “Milei se quedó mudo” al respecto.
Algo similar destacó la postulante del Frente de Izquierda (FIT), Myriam Bregman, quien consideró que “hubo un silencio llamativo” sobre el caso Insaurralde. “Me parece casi ofensivo que se mire para otro lado, con un 60% de pobreza infantil en la Provincia y que no se explique por qué hay un funcionario de joda en Europa mostrando derroche”, arremetió Bregman, quien consideró que “Milei llegó hablando de la casta y ni siquiera dijo nada”. “Ya no se sabe qué dice Milei, me confunde cada vez más: dice una cosa, después pide 35 años para su plan, no entiendo cuáles son las propuestas inmediatas y cuáles a futuro”, completó y concluyó que “sus ideas ya las vimos y fueron un desastre en el ‘90 y en 2001”.
Por su parte, Massa consideró que en el debate “quedó claro que hay tres proyectos de país: uno plantea un salto al vacío, otro plantea volver atrás y nosotros elegimos contarle el ‘para adelante’ a la gente”. “Yo no fui a teorizar ni a dar frases o slogans, fui a contar propuestas porque creo que los argentinos tienen la madurez suficiente para no someterlos a un debate transformado en un spot de campaña”, aseguró Massa, quien agregó que Milei “no solo no pidió disculpas, sino que mintió descaradamente a 20.000.000 de argentinos”, al responder sobre sus agravios al papa Francisco. Massa recordó que el postulante libertario “hace 15 días en una nota con (el periodista estadounidense Tucker) Carlson repitió los agravios contra el papa”, aunque en el debate argumentó que sus declaraciones se remontaban a mucho tiempo atrás.
Polémica con Milei por los desaparecidos
Lejos de recular, el candidato presidencial Javier Milei volvió a negar ayer la existencia de 30.000 detenidos desaparecidos durante la última dictadura militar, algo que desató un repudió prácticamente unánime en el campo político.
“Hay cuatro estimaciones de cifras y yo tomé la más alta para que no haya cuestionamiento de ningún tipo”, dijo Milei ayer al justificar su afirmación de que los desaparecidos “son 8.753”. Milei se consideró el triunfador del debate y opinó que el “peor desempeño de todos” lo tuvo Patricia Bullrich porque “todas sus argumentaciones eran simples intenciones de deseo”.
“Las frases ‘No fueron 30.000´ y ‘Durante los ´70 hubo una guerra´ nos retrotraen a los discursos que la propia dictadura utilizó para justificar su genocidio”, respondió la Secretaría de Derechos Humanos, a la vez que explicó que no se conoce con precisión la cifra “por el carácter ilegal y clandestino que tuvo el accionar del Estado y en especial de las Fuerzas Armadas”. “En Argentina no hubo una guerra ni hubo excesos: lo que hubo fue un Estado terrorista que planificó y ejecutó una matanza para imponer un modelo económico”, completó la secretaría.