En línea con el discurso de la última campaña que desplegó el gobernador Juan Schiaretti, el diputado nacional Carlos Gutiérrez arremetió ayer contra los males que genera la grieta y aseguró que sigue siendo un “negocio” sólo para el Frente de Todos y Juntos por el Cambio.
El presidente del bloque Córdoba Federal en la Cámara baja planteó dudas sobre las verdaderas intenciones del gobierno nacional respecto a lograr o no un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Dijo que el ajuste ya comenzó y que ni el oficialismo y la oposición quieren hacerse cargo de ese costo.
“Quiero ratificar algo que nuestro espacio viene diciendo con contundencia y de manera fundamentada: nosotros somos una fuerza de oposición al gobierno nacional. Nadie tiene que tener dudas sobre eso. Y tampoco tenemos que estar sobreactuando esta situación ni subestimándola. Esta es nuestra conclusión política al cabo de un derrotero de muchos años de relacionamiento con el kirchnerismo, donde claramente nosotros no compartimos la mayoría, por no decir casi ninguna, de las políticas públicas que el kirchnerismo lleva adelante, salvo las cuestiones de emergencia y con contextos especiales”, expresó Gutiérrez en diálogo con el periodista Mariano Bergero.
Al ser consultado sobre la decisión de no votar el Presupuesto nacional, el referente schiarettista afirmó: “Cuando esté en juego en serio la gobernabilidad vamos a tener una actitud coherente con nuestra historia. Pero eso no significa que nosotros no tengamos una visión totalmente de oposición. Y no es por una posición ideologizada o políticamente influida por la desesperación que otros tienen sobre qué va a pasar con su fuerza política en el 2023 en términos electorales. Nosotros tenemos una clara diferenciación con el Gobierno nacional porque los intereses en su conjunto de los cordobeses no sólo no están representados, sino que son atacados por el kirchnerismo”.
A continuación, en torno a la discusión que llegará al Congreso sobre el FMI, Gutiérrez advirtió que “no sabemos de qué se trata. Si hay una carta de intención, si la carta de intención representa en su conjunto al oficialismo o solamente es una visión del ministro (Martín) Guzmán. Hay dudas, incluso, sobre si esa visión de Guzmán es en solitario y si tiene o no el respaldo del Presidente. No sabemos qué piensa Cristina Kirchner. Es más, todo indica que Cristina no lo quiere al acuerdo. Acá lo que hay es un triste paso de comedia entre unos, que dicen que fueron los otros los que generaron la deuda, pero estos no saben cómo resolverla… en realidad dejaron un legado anterior que condicionó… y así vamos”.