A días de su asunción, el presidente electo, Javier Milei, se puso ayer al frente del proceso de cambio de Gobierno al encabezar distintas reuniones con su Gabinete económico, encabezado por Luis “Toto” Caputo, y con el actual Jefe de Asesores del Ministerio de Economía, Leonardo Madcurd, en uno de los pocos contactos públicos referido a la transición en esa área entre ambas gestiones.
Las reuniones se celebraron en las oficinas porteñas de Mariano Cúneo Libarona, el futuro ministro de Justicia: en una tarde frenética, por allí pasaron Santiago Bausili, que fue confirmado como el nuevo presidente del Banco Central de la República; Federico Sturzenneger, ex titular de ese organismo durante la presidencia de Mauricio Macri y autor del plan de reforma del Estado que presentaría Milei el lunes en el Congreso; y los economistas Martín Vauthier y Pablo Quirno, entre otros.
Los funcionarios pudieron tener allí un panorama sobre la situación económica del país que recibirá Milei y del BCRA, que según cálculos privados tiene reservas negativas por US$ 10.000 millones. Fuentes oficiales del actual ministro Sergio Massa anticiparon que habrá disponible para Caputo una caja chica de casi un billón de pesos para efectuar pagos considerados críticos para la administración pública, principalmente aguinaldos de trabajadores públicos. A la vez, sostienen que las reservas del BCRA rondarán los US$ 21.000 millones, niveles bajos pero bastante mejores que los citados cálculos privados. El gobierno entrante también tendrá una “caja chica” de reservas a mano del swap con el Banco Popular Chino por US$ 6.400 millones.
“Se debatieron los principales lineamientos para las reformas del Estado que llevará adelante el nuevo Gobierno y los primeros objetivos para cada área”, indicó LLA. Efectivamente, también pasó por las oficinas el ex subsecretario de Reforma y Modernización Armando Guibert, a quien las fuentes destacan como el encargado de “la reforma de Estado” durante la gestión del ex presidente Carlos Menem en los ‘90. Si bien no trascendió nada más de los encuentros, el futuro vocero presidencial, Manuel Adorni, escribió un duro diagnóstico en la red social X: “Que triste el país que dejan, la economía destruida, la educación despedazada y la mitad de la Argentina pobre”, afirmó.
Lo cierto es que Milei confirmó en las últimas horas la continuidad de algunos funcionarios de la actual gestión: el más conocido es Marco Lavagna, que seguirá al frente del Indec porque “sus equipos están trabajando en un proyecto que dotará al organismo de autonomía y autarquía para que deje de funcionar bajo la órbita del Ministerio de Economía”, según se informó. Además, se confirmó que Bausili –ex secretario de Finanzas con Macri- presidirá el BCRA mientras que Daniel Tillard pasará del Banco de Córdoba al Banco Nación (BNA); mientras que Darío Wasserman será el vicepresidente del BNA y Belén Stettler la secretaria de Comunicación.
Una asunción con el sello del mandatario
El presidente electo Javier Milei asumirá este domingo con una ceremonia de traspaso de mando y actos protocolares que, en algunos aspectos, se ajustarán a las tradiciones pero en otros tendrá sus propias peculiaridades.
A cuatro días del acto, las reuniones para ajustar detalles siguen realizándose bajo el mando de Jorge Faurie, ex canciller del gobierno de Mauricio Macri. Las fuentes anticipan que Milei jurará al mediodía ante la Asamblea Legislativa, recibirá en ese mismo recinto los atributos pero no pronunciará ningún discurso ante los legisladores, sino que lo hará en las escalinatas del edificio, ante lo que espera sea una “multitud”.
Otra novedad es que Milei pretende acotar la transmisión televisiva en “cadena”, limitándola a la jura y al discurso, mientras que el resto de la jornada será emitida por la TV Pública. Luego, Milei se trasladará a la Casa de Gobierno en un auto descapotable a lo largo de la avenida de Mayo, recuperando una tradición que no se repite desde Fernando de la Rúa.