En el marco del creciente escándalo que involucra al ex titular de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), Diego Spagnuolo, la oposición avanzó este viernes en la Cámara de Diputados con una ofensiva política y citó al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y al ministro de Salud, Mario Lugones, para que brinden explicaciones sobre los presuntos pedidos de coimas a laboratorios.
Francos concurrirá el próximo miércoles al recinto de Diputados para presentar su informe de gestión, en un contexto marcado por fuertes cuestionamientos a la Casa Rosada por las denuncias de corrupción en la ANDIS y por las fallas de control que derivaron en la tragedia del fentanilo contaminado. Su exposición está prevista a partir del mediodía y genera gran expectativa en la oposición, que busca respuestas frente a la crisis política que atraviesa al Gobierno.
En paralelo, la Comisión de Salud de la Cámara baja citó para el martes a Lugones y al flamante interventor de la ANDIS, Alejandro Vilches, a fin de analizar las denuncias que estallaron tras la difusión de los audios de Spagnuolo. La reunión se realizará a las 12 en la Sala 1 del Anexo de Diputados.
“Esperamos que tanto Lugones como Vilches se presenten para responder sobre las presuntas coimas en la compra de medicamentos de la ANDIS”, expresó Pablo Yedlin, presidente de la Comisión de Salud y diputado de Unión por la Patria.
La citación llega en medio de las revelaciones de Spagnuolo, ex funcionario y amigo personal de Javier Milei, cuyos audios exponen un entramado de corrupción que involucra a laboratorios y funcionarios del Gobierno. La causa, a cargo del fiscal Franco Picardi y el juez Sebastián Casanello, ya derivó en el secuestro del teléfono celular del ex titular de la ANDIS, hallado este viernes en Pilar dentro de un automóvil.
El impacto de las grabaciones incluso salpica a Karina Milei, hermana del Presidente, y golpea directamente en la estabilidad interna de la gestión libertaria. Al mismo tiempo, la crisis sanitaria por el fentanilo contaminado, que ya dejó cerca de un centenar de víctimas, mantiene bajo presión a la Casa Rosada, pese a los relevos de funcionarios de segunda línea en las últimas semanas.