El juez federal en lo civil y comercial Alejandro Patricio Maraniello, responsable de prohibir la difusión de los supuestos audios de Karina Milei, enfrenta actualmente nueve denuncias en el Consejo de la Magistratura, cinco de ellas por presunto acoso sexual a empleadas de su juzgado.
Maraniello fue notificado la semana pasada y tiene un plazo de veinte días para presentar su defensa por escrito ante la Comisión de Disciplina del Consejo. Las denuncias abarcan desde abuso de poder y maltrato laboral hasta uso indebido de recursos públicos, y algunas empleadas relataron haber sufrido tocamientos, comentarios fuera de lugar y acoso psicológico. Según las denunciantes, una de ellas debió recibir medicación y presentó episodios de depresión relacionados con los hechos, que formalizó ante la Unidad de Bienestar Laboral.
La Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres intervino en algunos casos para tomar declaración, y los expedientes podrían derivar en sanciones administrativas o incluso en la remoción del juez, a través de la Comisión de Acusación. Mientras tanto, el gremio judicial asegura que las entrevistas con empleados actuales y ex empleados revelan nuevos episodios de acoso y abuso de poder.
La intervención de Maraniello en la causa de los audios de Karina Milei coincide con la tramitación de estas denuncias. El juez ordenó el cese inmediato de la difusión de los audios, que habían sido filtrados desde la Casa Rosada y difundidos por el canal de streaming Carnaval, en una acción judicial solicitada por el Ministerio de Seguridad. La medida busca preservar intereses estatales y prevenir daños durante el periodo electoral.
El Gobierno sostiene que la filtración de los audios forma parte de una “operación de inteligencia no institucional” orientada a desestabilizar al Ejecutivo y afectar la campaña electoral, mientras que sectores opositores habrían coordinado la divulgación de los materiales en un contexto de incertidumbre política y económica.