Intendentes de las ciudades capitales de las provincias argentinas se presentaron en el Congreso de la Nación para exigir una modificación en la distribución de los subsidios al transporte urbano.
En ese marco, Daniel Passerini lideró esta iniciativa que busca crear un fideicomiso a través del impuesto a los combustibles para garantizar un reparto más equitativo de los fondos y evitar la discriminación hacia el interior del país.
La eliminación de un fondo compensador que beneficiaba al transporte en el interior, sumado al aumento de subsidios para el Área Metropolitana de Buenos Aires, ha generado malestar entre los intendentes, quienes reclaman un trato más justo en la distribución de recursos.
Passerini señaló que la situación actual es insostenible, con las provincias del interior destinando recursos presupuestarios que no estaban previstos debido a la eliminación del fondo compensador.
Los intendentes solicitan que si no habrá subsidios, entonces no los haya para nadie, y que se distribuyan de manera federal los recursos que actualmente aportan las ciudades. De esta forma, pretenden paliar las asimetrías existentes en el transporte urbano, donde los costos del pasaje varían significativamente entre ciudades del interior y la Ciudad de Buenos Aires.
El proyecto de ley presentado por Passerini podría afectar la recaudación del Gobierno nacional y generar tensiones con el presidente Javier Milei, quien ha suprimido el fondo compensador del transporte en el interior.
Los intendentes buscan que se reconozca y se resuelva la iniquidad en la distribución de subsidios, priorizando la equidad y el federalismo en la asignación de recursos para el transporte público.
En este contexto, Passerini subrayó la necesidad de abordar de manera más justa y federal la distribución de fondos, a fin de garantizar el acceso equitativo a servicios esenciales, especialmente en un contexto de creciente pobreza e indigencia.