Una encuesta realizada en el país indica que sólo el 14,5 % de las personas utiliza preservativo en todas sus relaciones sexuales, el 65 % advirtió usarlo a veces y el 20,5 % reconoció no usarlo nunca, según informó el viernes pasado la organización AHF Argentina (AIDS Healthcare Foundation) de cara al Día Mundial del Preservativo, que se conmemoró ayer.
“La estadística surge de una encuesta realizada en Argentina en 2017 a 30.000 personas que se acercaron a realizarse los testeos en 16 provincias de todo el país”, detalló Natalia Haag, Coordinadora Nacional de Prevención y Testeo de AHF Argentina, quién indicó que la cifra es similar en todo el mundo. Haag afirmó que “en Argentina más del 98 % de las nuevas infecciones de VIH (virus de inmunodeficiencia humana) son por tener relaciones sexuales sin preservativos” y que “hay un aumento de casos de otras infecciones de transmisión sexual (ITS) como la sífilis”.
Sobre la tendencia de poco uso del preservativo, Haag sostuvo que “por un lado, a nivel mundial hay una relajación a partir de que ya hablamos del Sida como una enfermedad crónica y tenemos tratamientos cada vez más eficaces y menos invasivos. Sin embargo, no se tienen en cuenta otras infecciones”.
A nivel nacional, la mujer identificó otras dos razones: “No hay campañas masivas importantes. Pero además, la falta de aplicación de la Ley de Educación Sexual Integral (ESI) también hace que se pierdan oportunidades de formación e información a edades tempranas”.
En 2012, AHF propuso como Día Mundial del Preservativo al 13 de febrero, en las vísperas del Día de los Enamorados, para recordar la importancia del uso del preservativo como barrera ante las ITS. Según datos del último Boletín Epidemiológico de la Dirección de Sida, ETS, Hepatitis y TBC de la Secretaría de Salud de la Nación, en Argentina se notifican cada año 5.800 casos nuevos de VIH, y se estima que 129.000 personas viven con el virus, de los cuales el 20 por ciento lo desconoce.
Por otro lado, un informe de la Fundación para Estudio e Investigación de la Mujer, indica que en nuestro país el 86 % de las mujeres con VIH padecieron en algún momento de su vida violencia de género. Tener relaciones sexuales implica muchas veces una negociación en la que una parte propone y la otra que decide por “sí” o por “no”. Pero cuando una parte rechaza y ese rechazo no es respetado, las consecuencias son marcas imborrables. En este sentido, según destacó Haag, “es muy difícil en algunas situaciones de violencia a veces exigir el uso del preservativo”.