La muerte de la agente de tránsito Cinthia Choque y las heridas sufridas por el agente Santiago Siciliano, tras ser embestidos por un automovilista en el barrio porteño de Palermo, dejó expuesto el estado de precarización laboral en que se encuentran los trabajadores de esa área que depende del gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Caba).
A partir de la tragedia, los controladores de tránsito salieron a cuestionar las condiciones de contratación estatal ya que Choque era monotributista y su caso no es aislado: el 70% de los agentes trabaja en esas condiciones.
Del total, hay 1.900 monotributistas y 800 de planta, según cifras oficiales. Desde la Secretaría de Transporte explicaron que la mayoría de los contratados tiene menos de tres años de antigüedad y que se trata de un cuerpo de agentes dinámico en el que “hay contrataciones en forma permanentemente”.
No sería el caso de la trabajadora fallecida, que llevaba cerca de seis años en funciones y seguía siendo monotributista.