Vecinos del Valle de Punilla se movilizaron ayer por las calles de Cosquín, en el interior provincial, para reclamar medidas concretar para preservar el agua y la vida”. La protesta, que partió de la intersección de las calles San Martín y Obispo Bustos, también se realizó en apoyo a los pueblos de Mendoza y Chubut, y en rechazo a la megaminería en todo el país. Argentina y el mundo crecen en conciencia y acciones contra el modelo extractivista ecocida.
Unimos fuerzas ante el cambio climático poniéndonos de pie frente a empresas y gobiernos cómplices del saqueo de nuestros bienes comunes. Queremos agua sin venenos y producción de alimentos sanos. Por eso, los pueblos decimos: El agua vale más que el oro”, señalaron los ambientalistas. En Punilla, el agua está escaseando, las cuencas están degradadas por incendios y desmontes, contaminación cloacal y basurales a cielo abierto.
Las fumigaciones llegan a napas y ríos. El lago San Roque está envenenado y el negocio inmobiliario se impone sin planificación, mientras los municipios no accionan para proteger nuestro bien común más valioso: el agua”, alertaron. Por otro lado, la marcha rechazó la autovía en Punilla y exigió al Estado participación ciudadana en los proyectos que afectan el ambiente”.
La medida de protesta fue organizada por la Asambleas de Punilla y la Asamblea en Defensa del Ambiente de Córdoba Capital. Contó con la adhesión de decenas de movimientos, asambleas y organizaciones vinculadas al medioambiente y la lucha contra el cambio climático.