Medardo Ávila Vázquez, de reconocida trayectoria en materia ambiental, junto a un grupo de médicos especializados en dicha temática, renovó ayer las denuncias por la contaminación de las aguas del lago San Roque. De manera paralela a la difusión de un video de un vecino de la zona náutica de Carlos Paz, donde se observa una importante cantidad de materia fecal en las aguas, Ávila Vázquez advirtió por la crítica situación sanitaria que se observa en el espejo de agua que abastece a parte de nuestra ciudad.
A esta situación se le suma la existencia de las algas cianófilas en una proporción importante. Tenemos los informes de la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad Nacional de Córdoba que vienen haciendo un seguimiento del lago y muestran que hay una cantidad de algas cianófilas muy grande, sobre todo en esta época del año, y que tienen toxinas que son sumamente tóxicas”, expresó en declaraciones a Canal 10. Uno de los riesgos es aspirarlas. Por ejemplo, haciendo sky acuático, nadando o cuando se está cerca del paredón donde se forma una nube enorme del vapor que sale del embudo y la cola de la novia. Están aspirando estas bacterias”, alertó.
Además, expresó que si bien en baja concentración, los estudios del Instituto de Virología de la UNC mostraron la presencia de coronavirus. Cabe recordar que hasta el momento no está comprobado que la presencia del virus en las aguas genere contagios. Días atrás, el médico sanitarista Emilio Iosa y el concejal Daniel Ribetti realizaron una presentación judicial en la que se denunció al intendente Daniel Gómez Gesteira, y al titular de la Agencia Córdoba Turismo, Esteban Avilés, por ocultamiento de información sobre el estado del lago y pidieron que se prohíba su uso turístico. Para Iosa, el municipio conoce que el 70% de las aguas residuales no van a parar a la planta de tratamiento sino al lago y a los ríos de los balnearios, lo cual es muy preocupante”. Además, alertaron por los efectos de la contaminación en las aguas de La Falda y Villa Giardino.
