La realidad de las mujeres está fuertemente atravesada por desigualdades de género en todos los ámbitos. Desde la consultora Zuban Córdoba y Asociados realizaron una encuesta para graficar con números cómo es la vida siendo mujer. De esta investigación se determinó que de 1.000 mujeres argentinas mayores de 16 años que fueron encuestadas, el 75% dijeron sentirse entre inseguras y muy inseguras al transitar el espacio público. Al respecto, se expresó Paola Zuban, la directora de la consultora, quien explicó que el espacio público es muy hostil para las mujeres. Nos sentimos más inseguras en la calle, en muchas ocasiones tenemos miedo de subirnos solas a un taxi, atravesar sectores pocos iluminados de la ciudad donde vivimos y algunos iluminados también”.
Otro de los datos contundentes que se desprenden de esta investigación es que el 85% de las encuestadas respondió que la violencia de género aumentó mucho en este último año de pandemia.
Asimismo, se les consultó cuál consideran que es el nivel de capacidad de las distintas instituciones para afrontar la violencia de género. El 55% de ellas piensa que la Justicia está entre poco y nada capacitada, seguida por los gobiernos provinciales, que obtuvieron el 54% de calificación negativa. Por su parte, las ONG´s son las mejor consideradas para afrontar la violencia de género ya que el 50% de las mujeres creen que están capacitadas o muy capacitadas.
A su turno, desde la Federación de Entidades Profesionales Universitarias de Córdoba (Fepuc), la Facultad de Ciencias Sociales de la UNC, y la Asociación de Docentes e Investigadores Universitarios de Córdoba (Adiuc) también realizaron una investigación que permite observar la inequidad de género. En este caso, se estudió la brecha salarial y se determinó que en Córdoba las mujeres que trabajan en el sector privado ganan un 42% menos que los hombres por igual tarea. Esta cifra posiciona a la provincia como uno de los lugares con la brecha de ingresos entre las y los profesionales más holgada y profunda del país. Además, los resultados del relevamiento muestran que el empleo público formal es igualador por naturaleza, toda vez que permite acercar las condiciones del empleo femenino a las del masculino, en cuanto a la paga. A pesar de esto, en el sector estatal la brecha es del 13% según el sondeo. En tanto, la disparidad trepa al 20% en el denominado tercer sector”.
Tareas del hogar
La desigual distribución de las tareas domésticas entre varones y mujeres se vio profundizada desde que se declaró la pandemia, se cerraron las escuelas, y se estableció el trabajo remoto ya que mucho de ese trabajo que antes era tercerizado, con la instalación del aislamiento, debió ser asumido en los hogares. Sin embargo, madres y padres no tomaron esas responsabilidades por igual.
Una encuesta realizada entre los colaboradores del Ministerio de Finanzas de la provincia de Córdoba evidenció que las mujeres consultadas dedicaban, en promedio, un 28% más de tiempo al trabajo no remunerado que sus compañeros varones: mientras que ellas destinaron 5,8 horas diarias a las tareas no pagas, los varones dedicaron 4,2.
Asimismo, el cuidado de personas a cargo es otro factor que evidencia una dispar ocupación entre varones y mujeres: mientras que el 88% de ellas dijeron haberse hecho cargo del cuidado en mayor proporción, entre los varones ese porcentaje fue del 55%.