Esto, a raíz de la presentación de una denuncia que dio cuenta de la inexistencia de un estudio de impacto ambiental de los trabajos. Dicha postura es sostenida por la Asamblea Ambiental San Marcos Sierras, desde donde sostienen que la intervención se concreta dentro de la Reserva Arqueológica Quilpo. Por ley, estos trabajos necesitan un estudio de impacto ambiental.
Al respecto, la Municipalidad de San Marcos Sierras manifestó su total disconformidad” y aclaró que la obra no necesita ningún tipo de estudios, ni informes preliminares, ni de impactos arqueológicos ya que sólo se llevan adelante obras de cordón cuneta, badenes de desagües y posteriormente la colocación de los pórfidos sobre la misma vereda”.