El gobierno provincial se reunió el viernes pasado en la Legislatura con los representantes de dos ONGs vinculadas a la creación del Parque Nacional Ansenuza, el proyecto a emplazarse sobre un sector de los Bañados del Río Dulce y la laguna Mar de Ansenuza, en el noreste provincial.
Se trata de Ana Liz Flores, directora de la Fundación Wyss, y de Hernán Casañas, director ejecutivo de Aves Argentinas. Cabe recordar que hace un par de semanas el vicegobernador Manuel Calvo anunció la decisión de la Provincia de ceder al gobierno nacional el dominio y la jurisdicción ambiental, para lo cual fue enviado un proyecto de ley que deberá ser tratado en la Legislatura. Dicha ley permitirá avanzar en la creación del Parque Nacional Ansenuza, con la consecuente conservación del ecosistema existente en esta región de la provincia.
El proyecto prevé la cesión de dominio y jurisdicción de un espacio territorial de la laguna Mar de Ansenuza, con una superficie de 185.939 hectáreas, como así también la cesión –en este caso solo de jurisdicción- de un polígono de 475.413 hectáreas situadas al norte de dicho territorio.
La Reserva Provincial de Uso Múltiple Bañados del Río Dulce y laguna Mar de Ansenuza conserva 1.000.060 hectáreas de bañados, lagunas y bosques nativos con funciones ecológicas irremplazables. Las características de la laguna Mar de Ansenuza la convierten en la más grande de Sudamérica y en la quinta a nivel mundial.
Este espacio resguarda una inmensa llanura por la que transita el Río Dulce hasta su desembocadura en el inmenso espejo de agua. Consolidar la creación del Parque y la Reserva permitirá generar una unidad de conservación basada en un paradigma estratégico para la gestión integrada del territorio, que incluirá tierras, extensiones de agua y recursos vivos, promoviendo la utilización sostenible, la protección del humedal y su biodiversidad asociada.