La Dirección de Seguridad Náutica de Córdoba oficializó la Resolución 1.120, que establece la prohibición total de navegación en ríos, arroyos y cursos de agua similares en todo el territorio provincial. La norma fue publicada en el Boletín Oficial y lleva la firma de su titular, Adrián Berelejis.
El organismo sostiene que la actividad “se torna extremadamente peligrosa” debido a que los cursos de agua cordobeses presentan caudales irregulares, crecidas abruptas y variaciones de nivel que impiden una navegación segura. A ello se suma la presencia de piedras irregulares, escasa profundidad en numerosos tramos y obstáculos asociados a diques y presas.
Según la resolución, estos factores aumentan el riesgo de que una embarcación o dispositivo de flotación sea arrastrado o impacte contra bañistas, especialmente durante el verano, cuando se registran crecientes frecuentes y hay mayor presencia de turistas.
La prohibición alcanza a todo tipo de embarcación y dispositivos de flotación, y se extiende a los espejos de agua y zonas de suelo que quedan cubiertas o descubiertas ante variaciones de caudal. El objetivo central es “salvaguardar la vida y la integridad física de las personas” mediante la prevención de accidentes vinculados a la actividad náutica.
La norma contempla solo una excepción: los eventos náuticos deportivos específicamente autorizados por la Dirección de Seguridad Náutica, que deberán contar con las condiciones de seguridad establecidas por el organismo.









