El arzobispo de Córdoba, el cardenal Ángel Rossi, llevó a cabo el jueves pasado una celebración religiosa junto con otros 18 sacerdotes en la que pidió apoyo para las mujeres que llevan adelante comedores y merenderos populares. El evento fue un “llamado de atención” para quienes tienen la responsabilidad de gobernar en momentos donde la asistencia social va en aumento por la demanda. Acto seguido se realizó una “olla popular” para terminar de reivindicar el mensaje.
El arzobispo ofreció una misa junto a curas villeros en barrio Angeleli, con un mensaje que buscaba “embanderar” a quienes ayudan al prójimo. Este mensaje coincide con el pedido a nivel nacional por el mal reparto de alimentos por parte del Gobierno Nacional y del conocido “escándalo” por dejar que toneladas de comida se venciera en almacenes. Dirigentes políticos y sindicales estuvieron presentes en la celebración.
Rossi pidió por “no bajar los brazos y no detenerse”, además de “acompañar a las madres de la patria”, quienes son un faro para los hambrientos. “Tienen la capacidad de escuchar el grito de los que viven en aguas turbulentas, de los pobres, de los que sufren hambre, de los que vienen dando vueltas por la droga. No es sólo servir un plato de comida. Entre esos platos y cucharas va el corazón, por eso digo no convertirnos en espectadores…”, sentenció Rossi, quien estuvo acompañado desde el altar por el padre Pablo Viola, a cargo de la capilla en la que se desarrolló la celebración; el sacerdote Melchor López, que trabaja en Villa La Tela y es vicario de “Los Pobres” en la Iglesia Católica, junto con el diácono Ignacio Loza.
El arzobispo compartió su memoria de cuando el actual papa Francisco era su superior y le encomendó abrir un comedor: “el hambre no puede esperar”, indicó Bergoglio en ese momento. En la misa, dos voluntarias de comedores pusieron la voz al reclamo: “La primera olla la impulsamos para 40 personas en pandemia y seguimos, somos una familia, no nos pagan, es por el vecino, por la familia. Nos sentimos familia”, dijo Ofelia, una de las referentes. “El Gobierno no nos está viendo, que nos llegue a los comedores”, sumó Mari, otra referente.
Entre los presentes estuvieron los representantes del justicialismo cordobés: diputada Natalia de la Sota; las ministras Liliana Montero del Ministerio de Desarrollo humano, y Laura Jure del Ministerio de Desarrollo y Empleo; y la secretaria de la Mujer, Claudia Martínez. Por el municipio, estuvieron Juan Domingo Viola de Participación Ciudadana; el titular de Gobierno, Rodrigo Fernández; Raúl La Cava, de Políticas Sociales, entre otros. Luego del evento la iglesia dispuso de tablones y un grupo de vecinos empezaron a repartir platos de guiso caliente al público que lo necesitara.