Una multitud de trabajadores de la cultura de Córdoba nucleados en el movimiento “Cordobazo cultural” llevaron a cabo ayer un cacerolazo frente al Patio Olmos, en rechazo del DNU y la “Ley ómnibus” que presentó el Presidente Javier Milei. El reclamo concreto es en contra del recorte de las partidas presupuestarias destinadas al arte y a la cultura.
En coincidencia con las resoluciones de “Unides por la Cultura”, una asamblea de trabajadores de la cultura a nivel nacional, el movimiento “Cordobazo cultural” convocó al cacerolazo de ayer. Esta manifestación también se llevó a cabo en diferentes ciudades del interior de la provincia como San Francisco, Traslasierra, Alta Gracia, San Marcos y Villa María.
La convocatoria fue el resultado las asambleas que congregaron a más de 450 artistas autoconvocados, trabajadores de la cultura, y diversas organizaciones políticas y sociales en los últimos días en el teatro La Piojera. De allí surgió realizar el “Cordobazo Cultural” en modalidad de cacerolazo, a lo que se sumaron canciones en vivo de artistas locales como Lucas Heredia.
La reunión coincidió con la anulación judicial de los artículos referentes a derechos laborales del DNU y se erigió como un bastión para aquellos afectados por la intención de derogar la Ley Nacional de Teatro (24.800). Dicha suspensión de la normativa comprende el cierre del Fondo Nacional de las Artes, el Instituto Nacional del Teatro, el desfinanciamiento de bibliotecas populares y del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa), entre otros organismos.
Esto, según denunciaron los artistas locales, redundaría la quita de fondos para estimular las actividades artísticas y culturales en todo el país, y en el despido masivo de miles de trabajadores de las diferentes dependencias del Estado vinculadas al ámbito en cuestión. A cambio, solo se lograría “ahorrar” un 0,2% del Producto Bruto Interno del país, según sostuvo Luciano Linardi, director del departamento de Cultura de la Asociacion Trabajadores del Estado (ATE) nacional.