Una investigación dirigida por el fiscal de Delitos Complejos número 1, el doctor Enrique Gavier, culminó con la detención de cinco individuos en relación con un caso de presuntas estafas inmobiliarias en la zona de Falda del Carmen y Villa General Belgrano, que involucra al reconocido periodista deportivo y médico Víctor Hugo Brizuela, conocido como «Bichi» Brizuela, y a su familia.
El caso implica irregularidades en la venta de terrenos por parte de las empresas Farezi S.A. y AC House S.A., con al menos 40 personas afectadas por estas acciones fraudulentas. La investigación desembocó así en la detención de cinco individuos en las últimas horas.
Los imputados incluyen al periodista deportivo Víctor Hugo Brizuela, hijo del ya fallecido periodista Víctor Brizuela, así como a su esposa y dos hijos. Sin embargo, estos últimos estarían siendo imputados por presunta falsedad ideológica y estafas, no por asociación ilícita.
Los abogados que representan a Brizuela y su familia afirman que fueron engañados de buena fe en este asunto. El doctor Facundo Amoedo, uno de los defensores, explicó que la familia Brizuela, en el año 2015, era propietaria de un inmueble en Falda del Carmen. En ese momento, se les presentó Pablo Marangonzin, representando a la empresa Farezi SA, ofreciendo un negocio para adquirir el terreno.
La oferta de compra incluía un anticipo y cuotas que, supuestamente, garantizarían a la familia la adquisición de lotes a través de un fideicomiso. Sin embargo, una vez firmado el fideicomiso, Marangonzin y Farezi S.A. dejaron de cumplir con los pagos, dejando una deuda de alrededor de 350.000 dólares a la familia Brizuela.
Además, la empresa fiduciaria nunca llevó a cabo el desarrollo del loteo y, a pesar de ello, vendieron terrenos a terceros de buena fe. Este incumplimiento dejó a la familia Brizuela desposeída del inmueble aportado al fideicomiso.
Cinco detenidos
En los allanamientos realizados, se detuvo a Pablo Marangonzin, Brian Emmanuel Clemente Acosta, Rubén Francisco Cabanillas y Erica Mariana Acosta, así como a una escribana involucrada en la confección de algunas escrituras, llamada Raquel Ada Gilli Ponti de Gómez Tello.
Los miembros de la familia Brizuela también fueron parte de estos procedimientos, pero hasta el momento no han sido formalmente notificados de ninguna detención.
La familia Brizuela, actualmente imputada por falsedad ideológica y presuntas estafas, sostiene que son víctimas de esta situación y aseguran haber sido engañados. Se espera que relaten su versión de los hechos cuando sean convocados por el fiscal Enrique Gavier para prestar declaración indagatoria.