El gobierno provincial autorizó la transferencia de fondos del Tesoro de la Provincia hacia Caminos de las Sierras S.A. (Casisa) para que la concesionaria de los peajes de Córdoba avance con obras viales en la ruta 9 Norte. Se trata de $ 4.656 millones que se destinarán a ejecución de la duplicación de la calzada en esa arteria, en el tramo “empalme autovía y el kilómetro 746,6”, según consta en la resolución 89/2024 del Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos provincial fechada en mayo, pero publicada este martes en el Boletín Oficial.
Para la obra, originalmente –a través del decreto 1973/2023–, se habían autorizado $ 4.400 millones con el habitual formato “a cuenta de futuros aumentos de capital social”, pero ahora, con una adenda, se sumaron otros $ 256.000.000 más. Según informó el periodista Pablo Petovel, el aumento de la inyección de fondos desde el Tesoro hacia Caminos de las Sierras se debe a que en el marco de la licitación para la contratación, “surge que la oferta presentada por la empresa Astori Construcciones de $ 4.656 millones resultó ser la oferta más conveniente”. En virtud de eso, la concesionaria pidió la ampliación.
Este monto se suma a los $ 14.422,8 millones aprobados en mayo con destino a la continuidad de la ejecución de la obra “Alternativa a ruta nacional 38 tramo Variante Costa Azul-La Cumbre”, para el tramo Variante Costa-Molinari.
En este mismo trimestre, en una operación similar, el gobierno provincial autorizó la transferencia de $ 4.868 millones para el viaducto de acceso a Valle Escondido, al oeste de la Ciudad de Córdoba. Allí, el trabajo más importante es un viaducto curvo de 170 metros que posibilitará la salida del tránsito desde Valle Escondido hacia Córdoba y evitará las demoras en la actual intersección semaforizada.
Entre las tres obras, la inyección de fondos hacia Caminos acumula $ 23.946 millones. La oposición cuestiona este mecanismo de fondeo porque asegura que, al ser Caminos de las Sierras una sociedad anónima en la cual la Provincia es la única accionaria, se hace más opaca la posibilidad controlar el gasto.