Tras el segundo caso de electrocución de un niño en una plaza de la ciudad, la Justicia reclamó a la Municipalidad de Córdoba que agilice el relevamiento del estado de las plazas. “La idea es tomar contacto con todos los relevamientos. Porque debe existir un contralor. Se ha solicitado a la Municipalidad y a la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec) un relevamiento pleno de todas las plazas de la ciudad, acerca del estado y su mantenimiento”, indicó el fiscal Raúl Garzón, quien hasta ayer estuvo a cargo de la causa abierta tras el deceso de Luciano Aranda, de 14 años.
Con la vuelta de la actividad judicial, el expediente pasará a manos de Guillermo González, que también está a cargo de la electrocución del hijo de Daniel Willington. “Se han dispuesto los peritajes para determinar las responsabilidades y causas de los hechos en plazas públicas con pérdidas de energía”, dijo el funcionario judicial, quien reiteró que el caso por el deceso de adolescente en una plaza de barrio Alto Alberdi “sigue en investigación”.
En ese marco, se conoció que la Policía Judicial llevó adelante una inspección en la plaza donde murió el adolescente, ubicada en Achával Rodríguez e Ingeniero López.
Mientras tanto, en lo que pudo ser otra tragedia, un menor de cinco años recibió una descarga cuando tocó un poste de alumbrado mientras jugaba descalzo en una plaza de barrio El Chingolo. El hecho ocurrió en la madrugada de la víspera y según familiares del damnificado, el niño quedó inconsciente tras recibir la descarga. Tras el hecho, el menor fue trasladado por un móvil policial al hospital Infantil, donde recibió el alta en horas de la tarde.
Estos dos episodios ocurridos en menos de cinco días se suman al sucedido a fines de noviembre del año pasado y que involucró a Javier Willington. El hombre estuvo al borde de la muerte cuando también tocó un poste electrificado tras una tormenta. Días atrás, Sandra Meyer, titular de la fundación Relevando Peligros, aseveró que en 2021 murieron electrocutadas unas 18 personas.
Epec apuntó contra una “intervención no autorizada”
La Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec) emitió un comunicado tras el hecho de electrocución del niño en barrio El Chingolo. En el texto, se indicó que en diciembre se había constatado una “intervención no autorizada” en el lugar.
Esta versión coincide con el relato de los vecinos de la zona, quienes explicaron que todos los años arman un arbolito de navidad. Sin embargo, advirtieron que “durante el mes de noviembre del 2021, a través de la Unidad Asesora de Energía Social y Energía Digna, realizó el último relevamiento incluido dentro del programa habitual de mantenimiento en los barrios ciudades, donde el alumbrado público está temporalmente a cargo de la empresa. En ese momento, no se detectó que el poste en cuestión estuviese electrificado”.
Tras el episodio, y con la repercusión que tomó, la empresa tomo la decisión de desenergizar el poste, al tiempo que reiteró que se encuentra a disposición dela justicia para colaborar en la investigación. Al respecto, Sandra Meyer, de Relevando Peligros, señaló que “hay que abordar este tema con previsión. Hay que cumplir la adecuación a las normativas existentes. Pero la ley de seguridad eléctrica fue ‘pateada’ por dos años”.
“Hoy la ley de seguridad eléctrica está en plena vigencia. La ley se sancionó en 2015 para salvaguardar las vidas de las personas, pero parece que no llegamos nunca a tiempo. Tuvimos una prórroga de dos años que el 1 de diciembre de 2021 caducó, y el oficialismo aún tiene el proyecto para prorrogarla por dos años más”, indicó.
Además, señaló que “los municipios cordobeses tenían la obligación de presentar proyectos de adecuación”. Sin embargo, expresó que de los más 400 existentes en la provincia, sólo cinco hicieron esa presentación para estar a normativa.