Docentes e investigadores de la Universidad Nacional de Río Cuarto fueron procesados por delitos contra la administración pública, la mayoría acusados de haber utilizado en beneficio propio las instalaciones y equipamientos de los laboratorios de la Facultad de Ciencias Exactas, y por ocultar computadoras y celulares en la causa.
El Juzgado Federal de Río Cuarto, a cargo de Carlos Arturo Ochoa, dictó el pasado miércoles el procesamiento de seis personas vinculadas a la Universidad Nacional de Río Cuarto (UNRC) y al Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) por delitos contra la administración pública por haber utilizado en beneficio propio las instalaciones, equipamientos e insumos de los laboratorios de la Facultad de Ciencias Exactas.
La lista de los señalados en la causa incluye a cinco investigadores y docentes acusados por hechos de peculado, administración infiel y defraudación en perjuicio de la administración pública, junto con una persona ajena a la comunidad científica, la cual fue procesada por encubrimiento, por ocultar computadoras y celulares de una de las involucradas en la causa.
La investigación se inició tras una emisión radial realizada en noviembre de 2024 en la que un abogado manifestó que era patrocinante de una docente de la Facultad de Ciencias Exactas que había denunciado irregularidades internas.
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De acuerdo a esta entrevista, la denunciante habría aportado pruebas de que los imputados utilizaban recursos de la universidad en beneficio propio y señaló puntualmente que la firma AB Agrobiotech Diagnóstica ofrecía servicios privados de diagnóstico a través de redes sociales utilizando laboratorios y equipos pertenecientes a la UNRC.
A partir de su testimonio, se ordenó una serie de medidas que incluyeron allanamientos, intervenciones telefónicas y levantamiento del secreto bancario y fiscal. Gracias a esta labor, “se detectaron por parte de los imputados un concierto de voluntades tendientes a ocultar prueba, elementos e instrumentos del delito”.
Desde el Ministerio Público Fiscal señalaron que, para llevar a cabo esta actividad, dos de los acusados encabezaban la organización y se encargaban de conseguir clientes y gestionar los trabajos, mientras que los tres investigadores restantes ejecutaban los ensayos en los laboratorios.
En el caso se indicó que todos hicieron uso indebido tanto de insumos (placas de Petri, solventes, alcohol y materiales reactivos) como de cromatógrafos y cámaras de flujo laminar en tareas que se realizaban en horarios laborales y también durante fines de semana.