La Provincia envió ayuda a las familias de Alta Gracia y Anisacate afectadas por la fuerte tormenta que azotó a buena parte de la provincia entre la noche de Año Nuevo y la madrugada de ayer. El relevamiento oficial detalla que el departamento de San Martín del Valle de Paravachasca fue uno de los más damnificados por el anegamiento de viviendas, que obligó a la evacuación preventiva de una veintena de personas, caída de árboles y postes de red de tendido eléctrico que interrumpieron ese servicio.
La ministra de Desarrollo Social y Promoción del Empleo, Laura Jure y el secretario del área, Paulo Cassinerio, coordinaron con el intendente de Alta Gracia, Marcos Torres, y su par de Anisacate, Natalia Contini, el envío de la asistencia, según informaron desde el Gobierno provincial. Para tal fin, se comenzó con el traslado de un cargamento con colchones, frazadas, alimentos y chapas, a la vez que se evalúa activar el Fondo Permanente para Atención de Desastres.
Al igual que en la Ciudad de Córdoba, la fuerte tormenta asoló a Alta Gracia y localidades aledañas en la noche de Año Nuevo. En el caso del departamento de Santa María se sumó el agravante de que cayó granizo del tamaño de pelotas de ping pong.
La lluvia empezó de manera intensa cerca de las 21.30 y antes de la medianoche llegó la piedra, que duró al menos 20 minutos. En algunas partes, la crecida fue tal que el agua arrastró varios autos.
El temporal también causó cortes de luz en toda la ciudad de Alta Gracia. La situación fue similar en Los Aromos y La Bolsa.
Se estima que llovieron 70 milímetros y se registraron vientos de hasta 60 kilómetros por hora, situación que provocó que el agua ingrese a algunas viviendas y obligó a las familias a autoevacuarse.
Al respecto, Roberto Schreiner, responsable de la Secretaría de Riesgos Climático, señaló que “fue un frente de tormenta que comenzó a la tarde en Río Cuarto, y que después se desplazó para General Deheza”, donde se registró granizo. En horas de la tarde-noche, el temporal llegó a Alta Gracia donde “descargó la mayor cantidad de agua”. El bombero precisó que Alta Gracia, Anisacate, Villa Allende y Malagueño fueron las localidades más afectadas.
Ante la llegada de esta cantidad de agua, Schreiner advirtió por crecidas en los ríos de la provincia. “El río Cosquín tiene una creciente de dos metros y medio, así que hay que tener cuidado”, aclaró el profesional. Asimismo, enumeró los ríos sobre los que se debería estar alerta con respecto a su creciente: Río San Antonio, Río Cosquín, Río Icho Cruz, Río Suquia, Río Saldán, Río Los Chorrillos, Río Calabalumba, Río Panaholma, Río San Guillermo, Río Mina Clavero, Río Santa Rosa de Calamuchita, Río Chico, Río Anisacate, Río Xanaes, Río Popopis.
Por su parte, desde la Municipalidad de Alta Gracia informaron que 80 empleados municipales junto a agentes de Defensa Civil trabajaron a lo largo de la mañana de ayer para liberar las calles, ya que decenas de árboles y ramas habían caído sobre la vía pública. En tanto, debido a las crecidas de los ríos Anisacate y Segundo, se interrumpió el servicio de agua potable de red en distintas zonas, donde Defensa Civil trabajó para recuperar progresivamente la normalidad.
La situación fue similar en las localidades de La Calera y Villa Allende y en las sierras chicas de Gran Córdoba. En tanto, en localidades de los departamentos de Juárez Celman y Río Cuarto, el temporal fue de mayor intensidad por la caída de granizos y en todos los casos no se reportaron víctimas humanas la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático, Catástrofes y Protección Civil.