La investigación sobre el doble femicidio perpetrado por Pablo Laurta, quien fue detenido en Gualeguaychú, reveló un elemento crucial que sugiere una premeditación escalofriante: el fiscal de Violencia Familiar N° 2 de Córdoba, Gerardo Reyes, indicó a Cadena 3 que el acusado ya había intentado ingresar a Argentina con un arma de fuego meses antes de cometer los crímenes.
El fiscal Reyes, a cargo de la investigación en Córdoba, señaló que «todo esto estuvo planificado». El intento de ingreso al país con un arma de fuego se produjo en marzo de este año. Reyes afirmó: «yo creo que ya venía allá con una intención, y evidentemente esto ha sido planificado».
Las víctimas de este horror son Luna Giardina y su madre, Mariel. A pesar de que existían denuncias previas, no se registraron en el fuero especializado en violencia de género, sino en una fiscalía de distrito. Estas denuncias anteriores fueron investigadas y trabajadas, a punto tal que de ellas surge la entrega del botón antipánico a Luna Giardina en octubre de 2023. El botón se había renovado trimestralmente.
No obstante las medidas de protección, estas fallaron en el momento crítico. Reyes explicó que, si bien Luna Giardina «lo tenía activo el botón todavía» (pese a que se había vencido justo el día viernes feriado), ella «sin duda que no tuvo tiempo a activarlo». Además, el dispositivo dejó de funcionar al quedarse sin batería el día del doble femicidio.
Otro elemento de protección que no llegó a implementarse fue la tobillera electrónica. Esta medida se había dispuesto para controlar al imputado, pero no se pudo aplicar debido a que el acusado nunca se presentó en el juzgado. El acoso a las víctimas era sistemático, según relató un vecino que mencionó que Pablo Laurta incluso había vivido en el techo de la casa de Mariel.
Las sospechas sobre Laurta no se limitan a las muertes en Córdoba. Todo hace suponer que también mató al remisero. El cuerpo hallado este lunes en la zona de Yerua, a unos 35 kilómetros al sudoeste, parecería pertenecer a Martín Sebastián Palacios, conductor desaparecido en Concordia.
Además, el espeluznante viaje de huida de Laurta fue confirmado por un taxista identificado como «Joaquín» quien relató que el doble femicida «le decía al nene que ya no iba a ver a la mamá».
El fiscal Reyes anunció que se espera que Laurta sea trasladado a Córdoba para ser indagado, lo que podría ocurrir el fin de semana o la semana próxima. Reyes subrayó que, de comprobarse los delitos imputados, la pena sería perpetua. En cuanto al hijo de Luna, su tía, Laura, ya llegó desde Chile para hacerse cargo de su custodia, y la situación del menor está siendo manejada por la SENAF para determinar su futuro. La fiscalía se encuentra actualmente en contacto con la fiscalía que interviene en Concordia para avanzar en la investigación.
El testimonio de la madre
En un giro estremecedor del caso que conmociona a la Argentina, Estrella Laurta Varela, madre de Pablo Laurta, el hombre detenido y acusado del doble femicidio en Córdoba, se pronunció públicamente con una condena inapelable contra su propio hijo. La madre afirmó no tener «duda de que su hijo cometió los crímenes» de los que se lo acusa. Profundizando en la naturaleza de los hechos, describió los asesinatos con palabras que subrayan la brutalidad y la falta de remordimiento: «es un asesinato a sangre fría, es un asesinato de odio».