Un presunto ladrón murió baleado por un policía en la vivienda de éste último, ubicada en el barrio Cuesta Colorada, de la localidad de La Calera. El hecho ocurrió el sábado pasado a partir de un robo en la casa del efectivo que se encontraba de franco.
Según la primera declaración del uniformado, estaba en su vivienda cuando observó que un hombre entró a robarle una garrafa de gas y salió a perseguirlo. La reconstrucción indicaría que el hombre habría resultado herido de arma de fuego por parte del efectivo policial en la huida, cuando dejaba su vivienda.
La información oficial da cuenta de un forcejeo entre ambos individuos. Según el parte policial, personal de esta fuerza llegó minutos después al domicilio, donde encontró el cuerpo sin vida de esta persona. Un servicio de emergencia constató en el lugar la muerte.
La víctima del hecho fue identificada como Alejandro Bustos, de 30 años. Fuentes policiales indicaron que el fallecido contaba con antecedentes por hurto y daño calificado en 2019 y por resistencia a la autoridad en 2020.
“En el procedimiento se secuestraron elementos relacionados a la causa, en tanto el efectivo policial fue trasladado a disposición de la Fiscalía de feria Dtto. 4 a cargo de la Liliana Copello”, concluyó el parte oficial. La fiscalía ordenó la detención del efectivo, imputado por el supuesto delito de homicidio agravado por el uso de arma mientras se trabaja en la investigación para determinar las responsabilidades.
En tanto, hubo otro caso de justicia por mano propia a manos de un efectivo policial el mismo día. Ocurrió durante un intento de robo en Isidro Casanova, en el partido de La Matanza, Buenos Aires, cuando un policía de la Ciudad de 21 años mató a un presunto delincuente de 14 e hirió a otro de 19.
Esto ocurrió cuando lo interceptaron en un intento de robo, durante la madrugada del sábado. Aunque trascendió que uno de ellos podría haber tenía un cuchillo, mientras que el otro hacía ademanes de poseer un arma de fuego, el fiscal de Homicidios Adrián Arribas, determinó que no poseían armas. El oficial, que cumple funciones en el barrio porteño de Villa Urquiza, declaró ante el fiscal, quien lo imputó por el delito de “exceso en la legítima defensa”.
Joven herido en una pileta municipal
Un bañista resultó herido en una pileta municipal en Barrio Santa Isabel 2a Sección. La situación se dio en el Polideportivo Parque los Algarrobos en calle Cajamarca esquina Georgia, alrededor de las 17 horas.
Fuentes indicaron que un muchacho se tiró a la pileta y terminó lesionado en la cabeza producto del golpe con el piso del fondo.
En medio de escenas de nerviosismo, fue rescatado y se llamó al servicio de emergencias 107 que acudió al cabo de un rato. El herido fue atendido y luego trasladado al Hospital de Urgencias, donde quedó internado.
Los voceros señalaron que, tras el accidente del joven, se produjo en el lugar una riña entre varias personas. Hubo golpes, patadas y objetos lanzados. Acudió un móvil y un efectivo, intentaba poner orden, terminó siendo atacado por varios jóvenes. Sufrió golpes en la cabeza y en un brazo. El efectivo recurrió a su pistola Byrna y disparó dos veces con cartuchos de gas pimienta para frenar la embestida. El oficial terminó en el Policlínico Policial. Otras patrullas acudieron para controlar la situación.