Leandro Porta, veterinario de Villa Allende, se quitó la vida tras ser erróneamente señalado como responsable de violencia contra una perra llamada “Negrita”. El episodio ocurrió en febrero de este año, pero salió a la luz en mayo.
En ese momento, las autoridades municipales indicaron que el maltratador era Hermes Alejandro Moreyra, un veterinario falso que atacó a palazos a una perra en el barrio cerrado de San Isidro Villa Allende.
Moreyra utilizaba la matrícula de Porta para conseguir la habilitación comercial de su negocio y, además, se valía del sello de su hermano Ariel Moreyra, quien sí es veterinario y también es el intendente de la localidad Uchaca.
La controversia se intensificó cuando el video del incidente circuló en redes sociales, convirtiendo a Porta en el blanco de hostigamientos. Las constantes agresiones digitales y una denuncia por mala praxis llevaron al veterinario a suicidarse.
A raíz del hecho, el Colegio Médico Veterinario (Covet), se manifestó en contra de los “comentarios malintencionados” que proliferan en las redes. “El Colegio Médico Veterinario de la Provincia de Córdoba lamenta profundamente el fallecimiento de uno de sus matriculados”, indicó el comunicado, haciendo un llamado a la reflexión sobre las consecuencias del acoso digital.