El defensor del Pueblo de la Provincia de Córdoba, a cargo de Mario Decara, presentó un informe donde se revela que la población que se encuentra en situación de calle en nuestra ciudad es de alrededor de 405 personas, de las cuales unas 40 no tienen ningún tipo de contención del Estado.
Un equipo técnico del organismo liderado por Decara relevó el año pasado a la población que pernocta y vive en las calles de nuestra ciudad con el objetivo de ofrecer un diagnóstico sobre esta problemática social. El relevamiento determinó que alrededor de 405 personas viven en situación de calle en Córdoba, un número similar al existente en los registros previos a la pandemia de coronavirus (a saber, en 2018 era de 426 y en 2019 de 476 personas en total).
El relevamiento fue realizado entre mayo y junio de 2021 e indica que nueve de cada diez personas en situación de calle contaban con un lugar acondicionado para dormir, alimentarse y asearse, al menos en ese momento. Sin embargo, aproximadamente 40 personas pernoctaban en la calle, a la intemperie, cuando se realizó el relevamiento. Había entonces 240 personas ubicadas en hoteles y pensiones dispuestos provisoriamente por la Municipalidad de Córdoba. También se registraban en total 125 personas residiendo en ocho albergues, de los cuales siete pertenecen a organizaciones de la sociedad civil y uno al ámbito del Estado municipal. El hogar provincial informó incluso que, al momento del relevamiento, no contaban con personas alojadas allí.
Durante el relevamiento se contabilizó un total de 108 personas en situación de calle que permanecían en distintas zonas y lugares del centro de la ciudad (como la Plaza San Martín y la zona peatonal, principalmente), aunque la mayoría dormía en algún hotel u hospedaje provisto por el municipio. Un día común en la vida de estas personas se divide entre la asistencia a comedores en busca de alimento y actividades que realizan para subsistir. A veces, buscan contactar a vínculos sociales o familiares -con quienes suelen tener pocos nexos-, mientras que alrededor de las 21 horas ya ingresan a los establecimientos que tienen asignado para dormir, en los que comparten habitaciones con otras personas en su misma situación. Estos establecimientos son hoteles u hostels que funcionan con sus respectivas reglas y normas de convivencia, donde pueden permanecer durante el día, tienen permitido salir a partir de las 9 de la mañana y deben ingresar entre las 19 y las 21 horas. En las habitaciones, comparten el espacio en promedio con entre cuatro a seis personas. Algunos, empero, se resisten a ser incluidos en estos hospedajes por motivos como el riesgo de robo de pertenencias, discrepancias o conflictos interpersonales, la imposibilidad de consumir alcohol y/o drogas, o no poder ingresar con sus mascotas, entre otras razones.
Dificultades para alimentarse y acceder a la salud
El informe del Defensor del Pueblo realizó una radiografía de la vida de las personas en situación de calle en Córdoba, no sólo de sus opciones de refugio. Por ejemplo, determinó que a la mayoría de las personas se les dificulta realizar todas las comidas diarias, pese a que frecuentan desayunadores y comedores pertenecientes a organizaciones sociales.
También cuentan con la ayuda de diferentes fundaciones e iglesias, y hasta de personas particulares que les proveen viandas. Los fines de semana es cuando más les cuesta comer. Sucede lo mismo con la obtención de ropa, abrigos, zapatillas, frazadas y colchones, que son brindadas a través de organizaciones, comedores, fundaciones, iglesias, vecinos, entre otros, pero que siempre aparece como un recurso escaso y que cuesta conseguir en períodos de frío intenso. Algunas de estas personas reciben ayuda estatal, como pensiones y tarjeta social.
En cuanto a la salud, la mayoría padece algún tipo de enfermedad crónica, que implica la necesidad de un tratamiento sostenido en el tiempo y con diversas especialidades médicas. Sin embargo, aproximadamente un tercio ha tenido inconvenientes para acceder a los hospitales públicos para encontrar una solución a su problema de salud. Algunos reconocieron situaciones de consumo de drogas, algo que aseguran hacen como una forma de sobrellevar su vida.
Al menos 40 cordobeses dormían a la intemperie
Si bien la mayoría de las personas relevadas en el informe de la Defensoría del Pueblo contaba con algún lugar de alojamiento para pasar la noche (de las 405, 125 se alojaban en ocho albergues -de los cuales siete pertenecen a ONGs y uno a la Municipalidad de Córdoba- y 240 eran asistidas en hoteles o pensiones dispuestos por el municipio para hacer frente a la pandemia de coronavirus), un dato del informe llamó la atención.
Se trata de la disminución de la población que asistía al hogar provincial, que al momento del relevamiento informó que no contaba con personas alojadas allí. El dato cobra relevancia en comparación a otros períodos, ya que en 2018 y 2019 la población en situación de calle hogarizada era de 212 y 231 respectivamente.
Ocurre que, por la implementación de las medidas sanitarias de prevención contra el coronavirus, estos lugares funcionarios al 60% de sus capacidades. Además, deben afrontar dificultades económicas, escasez de recursos humanos y materiales para gestionar sus instituciones en un escenario de nuevas exigencias y desafíos presentados por la pandemia. Sin embargo, en el momento del estudio se contabilizó que había 40 personas que dormían a la intemperie en las calles de nuestra ciudad, sin ninguna asistencia del Estado para su subsistencia en las noches de Córdoba.
