Las consecuencias de la guerra en Ucrania comienzan a expandirse hacia otras latitudes. Tal es el caso de la península de Crimea donde el sábado una potente explosión, que las autoridades rusas atribuyeron a un camión bomba, dañó el puente principal que conecta a la península con Rusia continental. A su vez, Bielorrusia denunció que Ucrania, Polonia y Lituania preparan un ataque contra su país.
Sobre el ataque en Crimea, a horas de la madrugada del sábado explotó un camión en un puente vital y simbólico para Rusia. Se trata de una infraestructura clave y símbolo de la anexión de la península ucraniana por Rusia, en 2014. Además de ser un punto de comunicación no solo para la economía regional, por el movimiento de personas y bienes, es crucial para el abastecimiento de las tropas rusas desplegadas en Ucrania.
Aún se desconoce con precisión el autor del hecho. Sin embargo, según fuentes rusas el dueño del vehículo sería un habitante de la región de Krasnodar, en el sur ruso. Al explotar, el camión voló por los aires una parte automovilística del puente y causó un incendio en siete tanques de combustible de un tren en la línea ferroviaria. Tres personas perdieron la vida.
Ucrania afirmó no tener vínculo con el ataque. No obstante, trascendieron a la prensa comentarios irónicos y burlones por parte de altos funcionarios. De hecho, el Correo ucraniano dijo que fabricaría un sello para celebrar la ocasión y que tenía ya listo el diseño.
Tras la explosión, Rusia abrió una investigación y la consideró un “acto terrorista”. El presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó ante su Consejo de Seguridad que si continuaban los “intentos de ataques terroristas” por parte de Ucrania, las réplicas serán “severas”.
A modo de respuesta, ayer Rusia realizó una serie de ataques en zonas civiles de Ucrania. Al menos 11 personas murieron y 64 resultaron heridas por bombardeos en Kiev, la capital ucraniana, tras el lanzamiento de 75 misiles rusos. Por el momento, las autoridades pidieron a la población permanecer en sus refugios.
Los ataques a la capital renovaron los repudios de los aliados de Ucrania: Reino Unido tachó los ataques de “inaceptables”, la Unión Europea y Polonia dijeron que se trataba de “crímenes de guerra”, Francia prometió incrementar la ayuda militar y Alemania dijo que era inminente la entrega de un primer sistema de defensa antiaérea a Kiev.
En consonancia, ayer Alemania afirmó que entregará “en los próximos días” a Ucrania un sistema de defensa antiaérea. El jefe del Gobierno alemán, el canciller federal Olaf Scholz, prometió en junio a Ucrania la entrega de sistemas Iris-T, capaces según él de proteger una gran ciudad de ataques aéreos.
“Los últimos disparos de cohetes contra Kiev y muchas otras ciudades deja claramente en evidencia la importancia de una entrega rápida de sistemas de defensa antiaérea a Ucrania”, declaró la ministra de Defensa alemana, Christine Lambrecht.
Bielorrusia busca proteger sus fronteras
El presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, acusó a Ucrania, Polonia y Lituania de preparar ataques contra su país.
“El domingo, mediante canales no oficiales, nos alertaron sobre un ataque en preparación desde territorio ucraniano contra Bielorrusia”, dijo Lukashenko sobre su país que limita al norte con Lituania y Letonia, al este con la Federación de Rusia, al sur con Ucrania y al oeste con Polonia.
Luego afirmó: “El entrenamiento en Polonia, Lituania y Ucrania de combatientes, incluyendo radicales bielorrusos, para cometer sabotajes, actos terroristas y un levantamiento militar en el país, se volvió una amenaza directa”.
Previamente, la semana pasada el presidente informó el despliegue de tropas conjuntas con Rusia, sin precisar en qué lugar ni el número de soldados.
“Debido al empeoramiento de la situación en las fronteras occidentales de la Unión (ruso-bielorrusa), acordamos desplegar una agrupación regional de la Federación Rusa y la República de Bielorrusia”, dijo Lukashenko.
Bielorrusia fue parte de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, es un importante aliado del Kremlin y dejó pasar a las tropas rusas por su territorio.